Está más que claro que cuando nos empieza a interesar alguien vamos a hacer (casi) lo que sea para parecerle atractiva. Si no es meterte al gimnasio por horas podría ser empezar una de esas dietas extremas para verte bien en ese vestido bodycon que tanto le gusta. Pero, ¿qué pasa cuando ya lo tienes asegurado?
El estudio explica que cuando ya estas en una relación bien formada cambias las motivaciones y prioridades que tenías cuando apenas lo estabas “conquistando”. ¿Te acuerdas lo importante que era que tu otra mitad te viera perfecta y hermosa todos los días? Pues esa prioridad cambia y ahora el verse bien para tu pareja pasa a segundo plano.
Aunque sea cómodo “dejarse ir”, es sumamente importante dentro de una relación poderse cuidar entre sí. ¿Cómo? Queda claro cuando estas en una relación es muy común que entre ustedes empiecen a adoptar pequeñas costumbres o actitudes del otro. Según un estudio de la Universidad de Newcastle, las mujeres son las que más adoptan este tipo de cosas y cuando tu novio come más que tú… he ahí el problema. Es recomendable que tú y tu pareja traten de llevar un vida saludable juntos. Pueden cocinar y hasta ir al gimnasio para entrenar, las opciones son innumerables.
Otro problema que te puede hacer engordar en una relación es cuando usas la comida para cubrir necesidades que no te satisface tu pareja. Si te sientes sola, incomprendida o cansada de cumplir todas las satisfacciones del otro sin tener retribución puede ser que busques comer más para sentir esa satisfacción.
La vida en pareja no es fácil. Es una montaña rusa constante de emociones encontradas y en ocasiones esas emociones o nos pueden hacer muy felices o muy tristes y como consecuencia secundaria, hacernos subir de peso. Lo importante es poder tener una clara comunicación entre pareja para arreglar esos problemas lo antes posible y llegar a un acuerdo que los beneficie a los dos.