Los viejos técnicos del fútbol han dicho que el resultado más peligroso es un 2-0. San Lorenzo de Almagro hizo su tarea y una buena cuenta de ahorro en Buenos Aires la semana pasada al derrotar por ese marcador al equipo chileno.
Palestino jugó uno de sus mejores partidos en este torneo, además fue el único representante nacional en avanzar hasta los cuartos de final. Desde el inicio de la Copa Sudamericana 2016, el equipo de La Cisterma siempre jugó de la misma manera con el sello de Nicolás Córdova: fútbol ofensivo y de buen toque de balón.
Este jueves derrotó por la cuenta mínima a la escuadra trasandina. Desde el arranque del partido Palestino comenzó a atacar, pero sin profundidad. Benegas, Valencia y Carvajal inquietaban el arco de Torrico. Corrían los minutos y el gol no llegaba. Así, los primeros 45 minutos terminaban 0-0.
En la etapa final, Palestino tuvo la intención de seguir atacando, buscando en los primeros 15´el descuento para igualar la llave y definir en lanzamientos penales. A los 10’ Fernando Belluschi fue expulsado tras un incidente con Jason Silva.
Los dirigidos de Nicolás Córdova seguían con la presión en campo contrario, y el premio llegó a los 69’, Leonardo Valencia convirtió un golazo de tiro libre. Sólo quedaba un gol para igualar la serie, pero no alcanzó. El conjunto tetracolor continuó con los ataques, pero no estuvo fino a la hora de definir.
Palestino (1): Felipe Melo; Francisco Sierralta, Ezequiel Luna. Benjamín Vidal, Roberto Cereceda; Agustín Farías, Esteban Carvajal; Franco Mazurek; Jason Silva, Leandro Benegas, Leonardo Valencia.
San Lorenzo (0): Sebastián Torrico; Marcos Angeleri, Fabricio Coloccini, Matías Caruzzo, Emmanuel Más; Mathías Corujo, Franco Mussis, Fernando Belluschi, Sebastián Blanco; Nicolás Blandi, Martín Cauteruccio.