Un grupo de estudiantes de la academia Isaac Newton de Londres han creado el preservativo que cambia de color cuando detecta una enfermedad de transmisión sexual. Algunos medios ya lo han calificado como el «condón semáforo», pero su nombre real es S.T.EYE y lo novedoso es que está fabricado con unas moléculas que brillan de diferentes tonos y dan la señal de alerta para los usuarios.
Por ejemplo, el color verde es cuando existe el riesgo de enfermedades como clamidia; el tono amarillo es para identificar el herpes; azul para la sífilis y morado para el virus del Papiloma Humano.
La idea de sus creadores es que al primer contacto, los hombres puedan saber que existe el riesgo de contagiarse de alguna enfermedad sexual y, de ese modo, poder prevenir con un tratamiento médico.
Por ahora, este producto no ha salido al mercado, pero ya existe el interés de algunas compañías para obtener los permisos y poder comercializarlo.