«Todo va a depender de lo que diga la próxima encuesta CEP«, señalan desde el Partido Socialista respecto de la irrupción del ex Presidente Ricardo Lagos, quien manifestó su deseo de competir por La Moneda. Arremetida que, de paso, dio un duro golpe a las aspiraciones presidenciales de Isabel Allende.

«Al interior del PS el tema es que Lagos quiere un acuerdo de todos los sectores, quiere ser ungido«, advierten desde la tienda. Justamente, el ex mandatario necesita varias voluntades. Hoy por hoy, hay militantes que impulsan la candidatura de la presidenta del PS, otros proponen al ex ministro José Miguel Insulza, e incluso algunos postulan al senador Alejandro Guillier.

Si bien el laguismo tomó un nuevo aire tras la irrupción de Lagos, apareciendo como un desafío para aquellos sectores que no desean retornar a la Concertación, las cartas aún no se reparten.

Falta, aún, quizás lo más importante para Lagos: la mentada encuesta CEP.

A meses de su entrega, sondeos internos del oficialismo revelan un fuerte rechazo al ex mandatario en las regiones de La Araucanía, Aysén y de Los Ríos.

«Por eso, Lagos necesitará aunar voluntades no sólo en el PS, sino también en la DC«, comentan la mismas fuentes.

Se sabe que Lagos propuso a la Nueva Mayoría condiciones para ser abanderado. Aunque dijo públicamente que está disponible para una primaria, al interior del conglomerado planteó que «es necesario que se reúnan con decisión muchas voluntades«.

Al respecto, el ex ministro del Interior y militante DC, Jorge Burgos, que «la disposición de Lagos es una muy buena noticia para las personas que opinamos que quien debe conducir a Chile sea alguien de centroizquierda, gradualista, que crea en el estado de bienestar, que crea que el motor de la economía sea el desarrollo económico y que los privados tienen un rol irreemplazable«.

«Hay que recibir con buen talante la disposición de Lagos», remarcó.

«Lo esencial es que hay que cambiar el rumbo, y Lagos tiene características para cambiar el rumbo. Creer que cada cierto tiempo hay que refundar todo, a mí me parece que eso no anda bien y los hechos lo demuestran», declaró Burgos.

En cambio, el senador y también DC Ignacio Walker advirtió que «si en la primera vuelta presidencial no aparece un candidato de la Democracia Cristiana será un subsidio a la derecha«.

“La DC tiene tres alternativas: competir en primarias, competir en primera vuelta o apoyar a Ricardo Lagos; yo soy partidario de la segunda. Restringirnos a una primaria de la Nueva Mayoría, con un gobierno que tiene un 15% de aprobación y una coalición que tiene un 8% es muy restrictivo. Debemos hablar de cara a la ciudadanía, presentando las propuestas y las ideas del futuro. Eso se puede lograr en una primera vuelta”, insistió Walker.

“Yo me pregunto cómo se entendería en el país que con 8 o 10 candidatos presidenciales en primera vuelta – porque no habrá menos – que la segunda fuerza política del país como lo es la DC y la primera fuerza política en número de alcalde no tuviera un candidato. Eso sería renunciar al liderazgo, y ese liderazgo se hace valer con candidatura presidencial», concluyó.