Esto es lo que debes saber sobre el cuidado de esta increíble raza:
Ten cuidado especial de los pliegues: El Bulldog es una raza que posee bastantes arrugas en todo su cuerpo, es decir pliegues donde se puede acumular suciedad y en donde se concentra el calor, por lo que son espacios de su piel donde es presenta mucha irritación. Para esto te recomendamos limpiar semanal estos lugares con un paño y agua oxigenada, permitiendo que estas partes respiren y se eliminen impurezas o suciedad.
Limpieza de ojos: Esta raza tiende a tener ojos llorosos y rojos, donde se puede producir bastante segregación. Para esto se recomienda limpiar ojos una vez el día en las mañanas.
Cepillado: Si tienes un Bulldog sabrás que son perros con pelo corto, por lo que se recomienda un cepillado a la semana para estimular el crecimiento de pelo nuevo y saludable.
Cuídalo de los resfriados: Esta raza de perro tiende a tener problemas de respiración, por lo que se recomienda protegerlo de climas fríos que puedan desarrollar alguna congestión. Para esto evita sacarlo a paseos muy temprano en la mañana. También debido a que son bastante chatos tienden a sufrir de ahogos, por lo que se recomienda evitar climas muy calientes y collares de ahogo.
Atento a su cadera: Estos perros como tienden a ser músculos y son bastante bajitos son propensos a desarrollar problemas de cadera. Para prevenir esto es importante una revisión desde cachorros ya que puede ser una enfermedad heredada por sus padres y también evitar la obesidad.
Hipotiroidismo: Este desorden en la glándula tiroides afecta a por lo menos 71% de los ejemplares de esta raza.
Debido a la importancia de las hormonas tiroideas para cada órgano del cuerpo los signos de esta enfermedad son notorios:
• Aumento de peso con poco consumo de alimento, es la señal más importante de la enfermedad.
• Alopecia focalizada en zonas puntuales, sin afectar extremidades y cabeza.
• Piel escamosa y color oscuro en la piel.
• Cambios de comportamiento: depresión, confusión e intolerancia al ejercicio.
• Reproducción, pérdida del lívido y desorden en el ciclo de celo.
• Problemas coronarios.