El Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, logró que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) prorrogue por 60 días más el Decreto de Emergencia Económica, que otorga poderes extraordinarios al Mandatario para legislar en esa materia económica. El anuncio se oficializó el jueves, el mismo día en que Maduro viajó a Cuba para refrendar acuerdos de cooperación con la isla.

En tanto el Parlamento, donde tiene mayoría la oposición -Mesa de Unidad Democrática MUD- se opone a la prórroga.

El decreto está vigente desde el 15 de enero pasado y era por dos meses y ahora se extenderá por otros sesenta días, lo que ha generado el rechazo opositor.

“La Asamblea Nacional ha tomado un rumbo errático. He extendido mil manos, pero parece que las agendas particulares se imponen y no se ve lo grande: al país. Lamento que el poder político que han obtenido circunstancialmente [los parlamentarios opositores] sea mal utilizado, para una diatriba donde se pierde el tiempo”, señaló el Presidente Maduro.

Por su parte el MUD señaló que Eesto es solo la continuidad de una política errónea que se empeña en culpar a las empresas privadas de una supuesta guerra económica contra el Gobierno”.

Poderes especiales
El decreto concede al Presidente venezolano facultades para la reorganización del presupuesto, dictar medidas para evitar la evasión fiscal, agilizar los trámites para importar los productos e insumos necesarios para el consumo, eximir de los requisitos cambiarios —en Venezuela hay un control de venta de divisas desde 2003— al sector público y privado, y disponer de los bienes que las empresas privadas para aumentar la producción nacional, entre otras potestades.

En este contexto, el Gobierno creó –hace una semana- un sistema cambiario dual: Divisa Protegida (Dipro) y Divisa Complementaria (Dicom). El nuevo esquema fue calificado por la oposición como una devaluación del bolívar por aumentar en un 1.500% la tasa de cambio en divisas para los venezolanos que viajen al exterior.

La crisis económica venezolana se agudizó -en parte- por la estrepitosa baja del precio del petróleo, principal ingreso del país, además se ha acentuado el desabastecimiento y la falta de productos.