El fiscal general de la Cámara del Crimen de Argentina, Ricardo Sáenz, aseguró este jueves que el fallecido abogado Alberto Nisman fue «víctima de delito de homicidio». Según consigna el portal de noticias Infobae, el dictamen establece que «el objeto procesal de esta causa hasta el momento, lo constituye la hipótesis de que Alberto Nisman ha sido víctima del delito de homicidio». Ante ello, Sáenz solicitó que la causa de la investigación de la muerte del fiscal pase al fuero federal. Esta es la primera vez que desde la justicia trasandina se presenta una opinión respecto al caso del fiscal que el 18 de enero de 2015 fue encontrado en el baño de su departamento con un disparo en la sien. Hasta ahora, la jueza de la instrucción, Fabiana Palmaghini, había afirmado que no se descartaba ninguna hipótesis, ni de suicidio ni de asesinato. La muerte de Nisman ocurrió poco después de haber acusado a la entonces mandataria, Cristina Fernández y a su canciller Héctor Timerman, de encubrir a los responsables de la causa de la AMIA, atentado sufrido en 1994 y donde murieron 85 personas. Saénz presentó su dictamen en la VI Sala de la Cámara del Crimen, integrada por los jueces Marcelo Lucini, Mario Filozof y Rodolfo Pociello Argerich, que el próximo 18 de marzo realizará una audiencia para decidir en qué fuero debe tramitar el expediente. En él, el abogado que participó de las protestas para pedir justicia para Nisman, aseguró que su colega fue asesinado en el marco de su trabajo sobre el caso AMIA, el cual llevaba investigando diez años, por lo cuál las indagaciones de su muerte deben pasar a la justicia federal. Sin embargo, la jueza Palmaghini ya había rechazado a mediados de enero que la causa pase a fuero federal por considerarla una decisión «prematura», ante la inexistencia, a su parecer, de elementos que establezcan la relación de la muerte del abogado con su rol en caso que investigaba. Por el contrario, entre sus argumentos, el fiscal enfatiza que sí existen pruebas. Una de ellas es que el arma que produjo la muerte del abogado habría dejado huellas del disparo en las manos de Nisman, residuos que no fueron encontrados. «Por ende, no caben dudas ya de que no fue Alberto Nisman quien disparó el arma que le dio la muerte, lo que necesariamente lleva a concluir que fue víctima de un homicidio», sostuvo. Además, destacó que según relatos de los testigos y de la familia, lejos de estar deprimido, Nisman «se encontraba satisfecho, de buen ánimo, plenamente convencido de la justicia de sus acciones, y abocado a la presentación que iba a efectuar ante los legisladores aquel 19 de enero». Un día después de su muerte, Alberto Nisman tenía planeado concurrir al Congreso para dar cuenta de su investigación que acusaba a la ex Mandataria y a miembros del gobierno. En caso de que la Cámara del Crimen decida aceptar el cambio solicitado por Saénz, la causa pasará a los Tribunales Comodoro Py, donde se tramitan las causas de corrupción. Emoljueves, 25 de febrero de 2016 9:38