Una promesa de Campaña y un firme deseo de concretar de la presidenta Michelle Bachelet. Este martes, la mandataria firmó la promulgación de la Ley 20.885 que crea la Subsecretaría de Derechos Humanos. “Espero que sí sea una noticia que en nuestro país podamos contar con una Subsecretaría de Derechos Humanos, que va a tener un rol muy significativo y sustancial en la promoción, en la educación, en asegurar que nuestro país tenga las políticas de derechos humanos, nuestro contexto normativo, legal, jurídico, y también a nivel de una cultura DDHH que corresponda a lo que Chile necesita y a los estándares internacionales a los que nos hemos comprometido».
Bachelet además recalcó que al proyecto iniciado en la administración del ex Presidente Sebastián Piñera, se incluyeron indicaciones con «aspectos medulares que estaban ausentes», porque el contenido era «claramente insuficiente» y de haberse aprobado tal cual la iniciativa no habría funcionado como era de esperar. La ley ahora entrará en vigencia tras su publicación en el Diario Oficial.
ROL de la Subsecretaría de DDHH
La subsecretaría que dependerá del Ministerio de Justicia, estará encargada de promover y coordinar políticas públicas y legislación en la materia, con el propósito fortalecer la visión del carácter jurídico de los derechos humanos.
Asimismo, fijará el Plan Nacional de Derechos Humanos, que contendrá la política para los siguientes 4 años, además de estructurar una planificación con metas e índices objetivos de cumplimiento, recursos financieros, asignación de responsabilidades, mecanismos de seguimiento y evaluación de resultados.
En la ceremonia, la máxima autoridad explicó el sentido de la iniciativa e indicó que “cumplimos así, por un lado, con un compromiso que habíamos asumido con el país, pero también con el deber superior que como Estado y sociedad tenemos, que es darle el máximo nivel institucional a una materia tan trascendental”.
Refiriéndose al nuevo órgano del Estado, la Mandataria afirmó que “al crear esta Subsecretaría, estamos entregando al conjunto de nuestros compatriotas, una herramienta del más alto nivel institucional y con las potestades necesarias para impulsar políticas públicas que sean acorde a un ámbito, por un lado, sensible pero a la vez, exigente y que estén a la altura de un país civilizado y democrático como Chile”.
A su vez, expresó que: “Nos vamos a abocar ahora a materializar su existencia física, para convertirlo efectivamente en un instrumento de paz, humanidad y fraternidad”.
PALABRAS PARA SOLA SIERRA
La Mandataria se tomó unos minutos para resaltar la labor de las entidades defensoras de los derechos humanos puesto que sin ellas «no tendríamos los avances que hemos logrado».
«Hoy estamos dando un paso importante en materia de derechos humanos, donde siempre tenemos que ir más lejos. Hace sólo unos días, el 1 de diciembre, una luchadora incansable en la lucha de los derechos humanos, Sola Sierra, habría cumplido 80 años«, manifestó con la voz quebrada haciendo un sentido homenaje a la extinta fundadora de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD).
Recalcó que «Sola Sierra nos enseñó que la lucha por los derechos humanos no se limita a conocer la verdad y a hacer justicia. Ella nos dijo: ‘Luchamos contra el olvido, porque el pueblo que no tiene memoria del pasado, no puede tener presente ni futuro'».
De allí, recalcó, la importancia de contar con esta «herramienta del más alto nivel institucional a la altura de un país democrático y civilizado como Chile» y que dependerá directamente del ministerio de Justicia.
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La Mandataria informó que se va a firmar el Reglamento de Establecimientos Penitenciarios que restringe beneficios intrapenitenciarios a quienes han sido condenados por violaciones a los derechos humanos y que se están trabajando indicaciones para la reforma constitucional y la ley que declara imprescriptible y no amnistiable los delitos de crímenes de guerra, lesa humanidad y genocidio.
«Creemos que efectivamente en todos estos avances podemos asegurar a la futura generación que nuestro país los derechos humanos tengan no sólo la relevancia teórica sino la del día a día que todos nos merecemos», indicó.
Asimismo, reconoció la aprobación en primer trámite en la Cámara de Diputados del proyecto que tipifica como delito la tortura y le otorga el carácter imprescriptible, señalando que espera que su trámite en el Senado sea igual de rápido.