Este lunes 30 de noviembre vence el plazo para pagar la cuarta y última cuota de las contribuciones de bienes raíces o Impuesto Territorial, correspondientes al período 2015. De la recaudación de este Impuesto Territorial, el 40% de los recursos van a la Municipalidad en donde el gravamen se origina y un 60 por ciento al Fondo Común Municipal (FCM).

El Fondo Común Municipal es una modalidad de redistribución de ingreso entre las distintas municipalidades del país. De este fondo, un 51 por ciento de los aportes corresponden al Impuesto Territorial; un 32 por ciento a los permisos de circulación; un 12 por ciento a las patentes comerciales; un 3,3 por ciento a las transferencias de vehículos; un 1,6 por ciento a las multas de fotorradares, y un 0,1 por ciento a bienes fiscales.

El Tesorero General de la República, Hernán Frigolett, destacó el aporte del pago de las contribuciones de bienes raíces al Fondo Común Municipal, y subrayó a su vez la importancia del FCM para el financiamiento de municipios más pequeños.

Frigolett subrayó que este mecanismo «tiene un efecto netamente redistributivo, donde las municipalidades de más altos ingresos y que mayor recaudación hacen del impuesto territorial, generan un aporte al Fondo que es mayor y eso permite que municipalidades que disponen de menores recursos obtengan un fortalecimiento de su presupuesto municipal».

Municipios de la Región Metropolitana cuyos presupuestos se benefician de manera importante del FCM son Puente Alto, La Pintana, Lo Espejo, El Bosque, Cerro Navia y La Granja. Algunas de las regiones, que presentan mayor número de comunas con dependencia financiera del FCM son Bio-Bío, Araucanía, Valparaíso, y Libertador Bernardo O’Higgins.

67 de las 346 comunas de Chile costean más del 60% de su presupuesto gracias al Fondo Común Municipal.