Koko (nacida el 4 de julio de 1971 en San Francisco, California) es una gorila adiestrada por la doctora y otros científicos de la Universidad de Stanford. La finalidad de su entrenamiento era poder comunicarse con ella mediante más de 1000 signos basados en la lengua de señas americana (ASL). Comprende aproximadamente 2000 palabras de inglés hablado.
La inspiración de su adistramiento se basó para el personaje de Amy la simio «parlante» de la novela «Congo», de Michael Crichton.
Koko es diminutivo de Hanabi-Ko, que significa «Hija de los fuegos artificiales» en japonés (en referencia al día de su nacimiento, el Día de la Independencia de los Estados Unidos).
La gorila Koko recibió un regalo especial por su 44º cumpleaños. La gorila es famosa por saber el lenguaje de signos americano, y se le entregó una caja con gatitos de los que podía elegir dos (el resto fueron adoptados en buenos hogares). Koko recibió su primer gato, “All Ball” en 1984, cuando explicó con signos que quería uno y no quedó satisfecha al recibir un gato de juguete.
Koko vive en la Fundación Gorila de Redwood City, California, con su entrenadora Francine Patterson. Según Patterson, Koko puede entender 2000 palabras en inglés y se comunica con sus entrenadores utilizando más de mil signos del “Lenguaje de signos de gorila”. Cuando Koko supo que All Ball murió, ella lloró e hizo con signos “gato dormir”.