Con tres semanas de paralización la presidenta de los funcionarios del Registro Civil, Nelly Díaz, debe estar dichosa por los más de un millón de trámites que la gente común y corriente, es decir el ciudadano, no ha podido realizar; la pérdida de pasajes, viajes de estudio y oportunidades laborales que se han ido al tacho de la basura sólo porque ella inventó supuestos bonos comprometidos, primero por el ex ministro de Justicia, José Antonio Gómez y ahora por la ministra Javiera Blanco.
La documentación existente –que reproducimos en Infogate- y que ha sido firmada por Díaz, demuestra que no hay tal bono o nuevos aumentos salariales a los ya obtenidos y documentados en el Protocolo de Acuerdo de 2014, que hasta ahora la dirigente no menciona. Protocolo de Acuerdo Ministerio de Justicia y ANERCICH 2014
De hecho este miércoles Nelly Díaz volvió a justificar la paralización pero poniendo como justificación el documento de agosto y le dijo a La Tercera: “Las razón de este paro es el desconocimiento que está haciendo la Dirección de Presupuestos del protocolo de acuerdo que firmó la ministra de Justicia, el subsecretario, la directora del servicio y yo, como presidenta de los funcionarios, el 21 de agosto”.
Protocolo del 21 de agosto
El pasado 17 de agosto comenzaron las conversaciones entre la dirigenta y las autoridades del Registro Civil y del ministerio de Justicia que culminó con la firma –nuevamente- de un “Protocolo de Acuerdo entre el Ministerio de Justicia, el Servicio de Registro Civil e Identificación y la Asociación de funcionarios del Servicio de Registro Civil e Identificación – Anercich” que se selló el 21 de agosto pasado .
El documento, de dos páginas, contiene cinco puntos y en ninguno de ellos se mencionan bonos o cifras, al contrario, el documento que firma Nelly Díaz, se refiere nítida y claramente a un “compromiso de avanzar en una propuesta de Plan de Fortalecimiento de la Gestión Institucional del Servicio de Registro Civil e Identificación”.
La única mención que se hace a remuneraciones –en condicional- está contenido en el punto tercero y cuarto pero bajo el rótulo de propuesta: “El Ministerio de Justicia y la Dirección Nacional del Servicio propondrán a la Dirección de Presupuesto un sistema de incentivo remuneracional que reconozca la labor de los funcionarios/as, conforme a los niveles de actuaciones alcanzados. El Ministerio de Justicia y la Dirección Nacional del Servicio propondrán alternativas de financiamiento, en relación al punto anterior”.
El punto quinto y final del Acuerdo establece que “El Ministerio de Justicia y la Dirección Nacional del Servicio solicitarán una reunión a la Dirección de Presupuesto a fin de presentar la propuesta para su evaluación y posible acuerdos. Dicha citación será enviada a la Asociación de Funcionarios por el Ministerio de Justicia, con lo anterior, el Ministerio de Justicia y la Dirección del Servicio cumplen con todo lo comprometido en reunión de fecha 17 de agosto de 2015, y firman con sus respectivos sellos Javiera Blanco, Ministra de Justicia, Ignacio Suárez, subsecretario de Justicias, Teresa Alanís, directora Servicio Registro Civil y Nelly Díaz, presidenta de Anercich que escribió bajo su firma Bono 2016!!”
Este documento, que la dirigenta ha evitado mostrar a la prensa, pero sí lo menciona, deja al descubierto que lo del bono comprometido es una invención: “El gobierno nos dijo que nos iba a dar un incentivo, firmó un protocolo el 21 de agosto y no lo cumplió. Además, hay un proyecto elaborado por Justicia y el Registro Civil donde dice que el bono se pagará a partir de 2016 y está estudiado hasta el costo. Pese a eso, el gobierno no cumplió, entonces ahora malamente nosotros podemos creer que si deponemos el paro el gobierno va a cumplir, al menos, en sentarse a conversar. Nosotros necesitamos una mesa de trabajo y un compromiso con personas serias”.
Estas afirmaciones, ante la evidencia del documento, en cuestión revelan la errónea interpretación que hace Nelly Díaz, ya que no hay compromisos y menos que se mencione el mentado bono, que a esta altura pasa a ser un delirio de Nelly que le sirve de pretexto para mantener un paro ilegal que tiene casi de rehenes a los ciudadanos.