“Nosotros siempre sostuvimos que aquí hubo un grupo de personas que acordó fijar precios, que hubo un mecanismos estructurado de alza de precios, que permitía alterarlos al tercer día”, sostuvo el fiscal Jaime Retamal.
La cadena inscribió además el nombre «La Farmacia Popular de Chile» en el Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual en octubre pasado, cuando la farmacia municipal de Recoleta ya era comentario entre la opinión pública.
Es extraña la fijación de Bolivia con la reclamación territorial con Chile, siendo que con Argentina ha perdido 420.758 KM2. y con Perú más de 250 mil.