A pesar que los empaquetadores señalan que es una buena norma para proteger el planeta de la contaminación, muchos reclaman que disminuirán sus ingresos con lo que pagan sus carreras universitarias o técnicas. Las propinas bajaron de $17 mil a apenas $7 mil.
“Esta ley de prohibición vulnera los derechos de la industria de bolsas plásticas a ejercer una actividad económica lícita, por lo que seguiremos sosteniendo la idea de que una regulación eficiente, ya sea a través del cobro, de un impuesto, o de las definiciones técnicas que debe tener el producto Bolsa Plástica, es sin duda el mejor camino para reducir el uso de las bolsas plásticas en Chile”, señala la organización gremial.
"En vez de buscar resquicios para frenar la prohibición de bolsas plásticas, los empresarios lo que debieran hacer es mostrar un espíritu osado e ir a la vanguardia en innovaciones y soluciones amistosas con el medioambiente", señaló Soledad Acuña, vocera de la campaña antiplástcos de Greenpeace.
La iniciativa fue analizada en su tercer trámite en la Sala de la Cámara de Diputados debido a que la propuesta original aprobada en la Corporación restringía el uso de bolsas solo para el territorio de la Patagonia Chilena, mientras que en el Senado, bajo el patrocinio del Ejecutivo, se amplió la prohibición para todo el territorio nacional, incorporando materias de fiscalización y de sanción.
Es extraña la fijación de Bolivia con la reclamación territorial con Chile, siendo que con Argentina ha perdido 420.758 KM2. y con Perú más de 250 mil.