El Gobierno salió a cuestionar lo planteado por la oposición, respecto a que se trataría de una “venganza” de Jair Bolsonaro tras el lapidario informe sobre derechos humanos en Brasil, el cual entregó la exmandataria en Ginebra como alta comisionada de DD.HH. de la ONU.
A través de un comunicado, la colectividad opositora señala que las tardías revelaciones de Leo Pinheiro “generan justificadas suspicacias, pues se realizan para justificar una rebaja de condena de un delincuente bajo la figura de la “delación premiada””.
Aseguran que tanto Giorgio Martelli y el presidente del Partido Socialista de ese entonces se negaron a colaborar cuando fueron invitados a la instancia sobre financiamiento irregular de campañas OAS.
“Los correos que se exhiben en 2009 muestran claramente que como parte de mi colaboración en la campaña presidencial del Presidente Frei, y por instrucciones de su comando, yo le informé al entonces representante de OAS en Chile, el mecanismo legal y formal de aportes reservados que cualquier empresa chilena (como era OAS Chile) debía conocer”, sostiene el ex operador político.
En 2013, durante el primer gobierno del actual mandatario se asignó el contrato a OAS, Hyundai, Systra y Aas-Jakobsen por más de 550 millones de dólares, siendo la única oferta, que incluso era más barata que las bases de licitación.
Es extraña la fijación de Bolivia con la reclamación territorial con Chile, siendo que con Argentina ha perdido 420.758 KM2. y con Perú más de 250 mil.
El Presidente Gabriel Boric se refirió este jornada a la segunda vuelta de las elecciones de gobernadores, destacando la participación y el orden de...