El Obispado de Valparaíso salió a responder a los cuestionamientos que se le han hecho luego de la orden de no innovar pedido a la Corte de Apelaciones de Rancagua, afirmando que la intención no es obstaculizar o impedir el trabajo de la justicia.
A través de un comunicado, el Obispado explica el proceso de incautación de documentos que el fiscal Emiliano Arias realizó en el marco de las indagatorias sobre abusos sexuales contra menores por parte de religiosos.
“El Obispado de Valparaíso el jueves 13 de septiembre de 2018, entregó todo lo que vino a incautar la Fiscalía el día del allanamiento. Abrió sus puertas, no tenía nada oculto y el personal colaboró amablemente con el Fiscal. Así lo haremos cada vez que seamos solicitados. Siempre ayudaremos tal como lo hicimos ese día. Y en ese sentido estamos trabajando con resultados de conocimiento público”, señala.
En cuanto a la presentación del recurso de protección y la petición de no innovar, la entidad menciona que “va en el sentido de cuidar dos principios fundamentales de nuestra legislación en Chile: a) cuidar y proteger la dignidad y los derechos de todos los ciudadanos y b) colaborar con la mayor eficacia con la justicia. Razón por la cual, así como cuidamos la dignidad de las víctimas de abusos de parte de algunos clérigos, así también cuidamos a los que han sido sometidos a un allanamiento de parte del Ministerio Público, al que jamás nos opondremos y que sólo pedimos se realice según su propia reglamentación. De ninguna manera pedimos una excepción a la Ley, sólo ser tratados como cualquier ciudadano. Es nuestro compromiso. Se lo hemos dicho a los denunciantes y a los que se esfuerzan para atender sus demandas”.
En ese sentido, explica que “nuestra intención no es obstaculizar ni menos impedir la acción de la justicia. Pedimos que se haga conforme a derecho para cuidar la dignidad y los derechos fundamentales de todo ciudadano. Convencidos de que así se avanza con la mayor celeridad en los procesos judiciales. De esta forma colaboramos de la mejor manera para encontrar la verdad de los hechos y administrar con eficacia la justicia que exigen las víctimas”.
“Mantenemos nuestra plena disposición al diálogo, tal como lo hemos hecho tanto en público como en privado con los denunciantes y víctimas. A ellos les volvemos a agradecer por su ejemplo y la ayuda que han dado para avanzar juntos en la anhelada creación de ambientes sanos y seguros”, concluye el texto del Obispado de Valparaíso.