El senador republicano estadounidense, John McCain, rival del ex Presidente Barack Obama en las elecciones de 2008, falleció ayer sábado a los 81 años debido a un cáncer cerebral que padecía.
McCain murió rodeado de sus seres queridos en Sedona (Arizona), un día después de que su familia anunciara que había decidido suspender el tratamiento del cáncer cerebral que lo había alejado de la política en los últimos meses.
Prisionero de guerra torturado por sus captores en Vietnam, el senador y ex candidato republicano a la Casa Blanca en 2008 fue siempre visto como un político independiente y fiel a unos ideales que a menudo le enfrentaron con su partido y en los últimos meses con el presidente Donald Trump.
McCain era considerado un «héroe» de fuerte carácter y un tanto disidente, lo que lo llevó a tener problemas durante su época de estudiante en la base militar.
El senador por Arizona se definió a sí mismo como un «joven fuera de foco y rebelde«, al que casi expulsan en varias ocasiones de la academia militar, pero que fue capaz de transformar una vida que, reconoció, estuvo llena de «errores«, aunque al final trató de servir a su patria.
Este mismo carácter rebelde lo demostraría al oponerse a varios presidentes, especialmente a Trump por sus planes para revocar la reforma sanitaria del expresidente Barack Obama y la construcción de un muro fronterizo con México.
Nacido el 29 de agosto de 1936 en una base militar en el Canal de Panamá, cuando aún se encontraba bajo el control estadounidense, McCain siguió los pasos de su padre y de su abuelo y se alistó en las fuerzas navales.
Una de las pruebas más duras y que marcaría para siempre su vida comenzó el 26 de octubre de 1967 cuando tenía 31 años de edad. Su avión fue derribado sobre Hanoi y fue prisionero de guerra cinco años y medio en Vietnam, donde fue sometido a fuertes torturas físicas y mentales.
Por su servicio militar recibió múltiples reconocimientos, incluyendo el corazón púrpura, y tras regresar a la vida civil en 1981 se mudó a Arizona, donde inició su carrera política.
Un año más tarde fue elegido por primera vez como congresista y en 1986 se presentó como candidato al Senado federal, donde siempre trabajó en favor de los derechos de los veteranos de guerra y, gracias a sus esfuerzos Estados Unidos y Vietnam normalizaron sus relaciones diplomáticas en 1995.