Por suerte cada vez son más los tratamientos no invasivos que actúan sobre el rejuvenecimiento de la piel, como PLASMAGE®, una nueva tecnología basada en plasma fraccional que está al servicio de la medicina estética, y que ha revolucionado la industria estética en todo el mundo.
«El procedimiento está indicado para realizar blefaroplasma (eliminación de la piel no deseada de los párpados sin cirugía), para eliminar arrugas alrededor de los ojos y de la boca, para tratar cicatrices, estrías, queloides y marcas de acné», indicó el Dr. Jorge Rivera, médico especialista en Medicina Estética Regenerativa y Anti Age.
Y es que cada vez son más las mujeres y hombre que prefieren cambios más naturales en lugar de procedimientos como la cirugía. Es por eso que la combinación de tratamientos estéticos no invasivos está en alza con un único objetivo: eliminar los tejidos dañados de la dermis para dar lugar a una piel nueva y renovada.
Rodolfo Medel, gerente general de Flamamed, empresa que importa y distribuye los equipos en Chile, enfatiza que «el crecimiento de los tratamientos mínimamente invasivos desde el 2000 a la fecha aumentó en un 81%, esto porque los pacientes son cada vez más exigentes y buscan procedimientos ambulatorios con resultados inmediatos».
¿Cómo funciona PLASMAGE, el equipo que llegó para revolucionar la estética?
PLASMAGE® produce una sublimación (vaporización) selectiva de los queratinocitos, la capa más superficial de la piel, logrando una retracción de la piel y disminución o eliminación de las arrugas. El plasma fraccionado es generado por la ionización de la atmósfera existente entre el cabezal del equipo y la piel del paciente.
Al aplicar la energía de manera fraccionada tenemos la máxima precisión y el menor daño colateral a las células. La aplicación de una crema anestésica permite realizar el tratamiento minimizando al máximo el dolor del paciente, por lo tanto, Plasmage, es una terapia no invasiva con excelentes resultados estéticos y regenerativos.
