Anoche fue el último debate de los ocho candidatos presidenciales, a pocos días de que se realicen las elecciones, y como fue la tónica de los anteriores, tanto televisivos como radiales, los abanderados no defraudaron y provocaron un bostezo generalizado en la audiencia por la carencia de intercambios y discusiones de ideas y propuestas para lo que sería un eventual próximo gobierno.

Sin embargo, en algunos pasajes de las más de dos horas que duró el “debate”, hubo un interesante intercambio de posiciones y definiciones que podría considerarse como los momentos más álgidos de este “programa televisivo”.

Uno de esos fue cuando Marco Enríquez-Ominami interpeló al candidato de la parte de la Nueva Mayoría, Alejandro Guillier, por una frase que puso en una red social el diputado radical Fernando Meza.

Meza colocó lo siguiente: “Su padre a quien conocí, si estuviera vivo, le metería un tiro por traidor”.

Ese comentario motivó a ME-O exigir al senador por Antofagasta que definiera su repudio y medidas contra el diputado radical, como el llamado que hizo para separarlo de su campaña.

Sin embargo, Guillier no contestó la interpelación que le hizo el sempiterno abanderado y, por el contrario, se mostró molestó.

Otro momento fue el que vivió el candidato de la derecha, Sebastián Piñera, cuando atribuyó una frase equivocadamente a Lenin. El ex mandatario dijo “miente, miente, que algo queda”, ante lo cual el abanderado de Unión Patriótica, Eduardo Artés, le refutó su comentario, indicándole que esa frase correspondía al ministro de Propaganda nazi, Joseph Goebbels.

Para salir del paso, Piñera en otra oportunidad volvió a retomar el tema y señaló que “con la ayuda de Google había revisado y confirmaba que la frase exacta no se le atribuía al dirigente ruso. Gracias, Eduardo”.

Otro punto álgido del “debate” fue el intercambio de palabras entre el candidato de la extrema derecha, José Antonio Kast, y el senador Guillier, por el tema de la violencia en La Araucanía.

Fue en el instante en que Guillier usó su derecho a réplica para responder, pero el ex UDI, no respetando el formato del programa, comenzó a contestarle al aire y le enrostró que no le había pedido disculpas por decirle que tenía que ir al psiquiátrico.

Otra salida de Kast ocurrió con el conductor de Canal 13, Ramón Ulloa, cuando comenzaron a discutir sobre los métodos anticonceptivos, incluso el periodista le dijo en un momento al aspirante a La Moneda que “usted es el candidato, no yo”.

Todo se dio cuando el periodista le consultó respecto a si en su gobierno hablaría de la educación sexual y si se potenciaría una campaña del uso de anticonceptivos.

Ante esto, Kast le contestó respecto a qué método anticonceptivo utilizaba con su esposa, ya que anteriormente había señalado que él utilizaba el método natural, sin embargo,  dejó claro que de todas formas enseñaría a los jóvenes cómo usar condones en las clases de educación sexual.

Finalmente, el último momento cumbre de este “debate” fue la acusación de “imperialista” que dijo Artés en contra de la Presidenta Michelle Bachelet.

Artés acusó en un instante a la mandataria de ser de derecha y para esto recordó su pasó por Nueva York al mando de ONU Mujer.

Al respecto, sostuvo que “Bachelet es una representante del imperialismo”, añadiendo que la jefa de Estado fue “regaloneada” por dichos intereses.

Otro punto interesante fue el que brindó el senador y candidato Alejandro Navarro, cuando se tiró en picada contra el subsecretario Mahmud Aleuy por el decreto que entregará facultades a las policías para mantener por dos años el registro de llamadas y mensajes telefónicos.

Sobre el tema, Navarro dijo que tener una “vieja y larga historia de encuentros y desencuentros” con el subsecretario en la época que era parte del Partido Socialista.

En ese sentido, apuntó a que “tenía por el cierta consideración pero cuando se fue de vacaciones y dejó en el desamparo a la presidencia la imagen de Aleuy en mí, se cayó muchísimo, creo que debió irse con vacaciones indefinidas. O manda la Presidenta o manda el subsecretario. Son reemplazables los subsecretarios, nadie es imprescindible”.