Partido estelar. Por un lado, el Campeón del Mundo; por el otro, el Bicampeón de América. Si se quiere, el tercer clasificado del Ranking FIFA (Alemania) y el cuarto (Chile). Bajo el prisma que se mire, el choque que este jueves animaron en Kazán La Roja y la Mannshchaft se trató de lo más selecto del fútbol mundial… El 1-1 con que se saldó el desafío es muestra fiel del equilibrio entre dos de las escuadras más importantes del mundo.
Chile arrancó el compromiso con un tranco arrollador. A los seis minutos, Alexis Sánchez se transformó en el goleador histórico de La Roja, al marcar su gol 38 con la Selección, al definir con un remate rasante luego de un error en la salida de los teutones.
Chile dominó con autoridad en la primera parte. A los 20 minutos, un zapatazo lleno de pólvora de Eduardo Vargas remeció el horizontal del arco defendido por Marc-André Ter Stegen y las constantes llegadas por las bandas trajeron severo riesgo a la retaguardia alemana.
Justo antes del descanso, llegó el empate del campeón del mundo. Un desborde por la banda izquierda del ataque terminó con la definición de Lars Stindl arremetiendo por el centro. 1-1 al descanso.
En la segunda fracción, el partido fue intenso pero con menos ocasiones de gol. Ambas potencias sacaron a relucir sus respectivas tácticas para mantener a raya a tan engalanado rival.
Al cabo, un empate importante para la escuadra de Juan Antonio Pizzi, que con cuatro unidades y aún a la cabeza del Grupo B, espera el domingo para definir ante Australia (11:00 horas de Chile) el paso a la siguiente ronda de la Copa FIFA Confederaciones.
