Aguas Andinas presentó en su junta anual de accionistas el detalle de las inversiones que está realizando para mitigar los eventos de turbiedad extrema en el Río Maipo, como consecuencia del cambio climático.
Las inversiones superan los $120.000 millones, de los cuales $47.000 millones ya fueron ejecutados en un Plan de Obras Fase 1, que está operativo desde enero de 2014, y que permitió elevar a nueve horas la autonomía del sistema y significó elevar en un 25% las reservas de agua potable. Esta primera fase ha permitido mitigar 30 eventos de alta turbiedad en rio Maipo, sin afectar a clientes, desde su puesta en marcha. El Plan de Obras Fase 2, incluye el Proyecto Pirque, que permitirá reservar 1,5 millones de metros cúbicos de agua cruda, triplicando las horas de autonomía del servicio de agua potable de 9 a 32 horas. Esta iniciativa, está cumpliendo su tramitación en el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental. La inversión es entorno a los $60.000 millones y estará lista en 2019.
En paralelo, Aguas Andinas presentó a la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS) una propuesta de obras complementarias que incluyen ocho estanques de agua potable y la construcción de nuevos pozos que permitirían aumentar la autonomía de suministro un 20% adicional respecto de la situación actual, es decir, de 9 horas a 11 horas. La inversión estimada es en torno a los $15.000 millones.
En su discurso, Guillermo Pickering, presidente de Aguas Andinas, resaltó que “nunca hemos eludido inversiones, y nos duele que eso se ponga en duda”. Asimismo enfatizó que sólo van a tarifas las obras que están operativas y en funcionamiento, “en esto quiero ser categórico: mientras los proyectos están en construcción los clientes no pagan por esas obras”.
Pickerign (DC) señalo además que: «Se ha dicho ligeramente que el cambio climático es discutible y una excusa demasiado general y abstracta frente a las responsabilidades concretas de Aguas Andinas.
Hasta este año, y más allá de estas lluvias convectivas, nadie puede poner en duda que llevamos 8 años de una sequía de gran intensidad, y que si el suministro de agua potable no se ha visto afectado no es por la ocurrencia de un milagro sino por la decidida y efectiva acción de Aguas Andinas, que ha invertido numerosos recursos en profundizar pozos, comprar o arrendar derechos de agua, gestionar con prudencia las reservas del embalse El Yeso y a cometer un importante programa de eficiencia hidráulica. Este solo plan, el de eficiencia Hidráulica, significa en 3 años una inversión de aproximadamente 30 millones de dólares.
Las lluvias precordilleranas como las que han afectado a la cuenca de Santiago han provocado desbordes de ríos, inundaciones, aluviones, daños en la infraestructura, damnificados y muertos en Colombia, Ecuador, Perú y también en Chile. Baste recordar lo sucedido en Copiapó, Calama y en toda nuestra zona central en los últimos años. Incluso en los aluviones del pasado mes de febrero murieron como consecuencia de ellos varias personas», señaló el máximo ejecutivo de la sanitaria de capitles españoles.
Las obras para llegar a 48 horas de autonomía en Gran Santiago
En la oportunidad, la empresa explicó que le presentó a la SISS un Plan de Obras de Seguridad Fase III, con una serie de opciones que permitirían lograr un respaldo del suministro de agua potable igual o mayor a 48 horas. La empresa está priorizando cuatro alternativas (cada una cumple con el objetivo).
• Un segundo estanque de agua cruda contiguo al estanque en proyecto (Estanque Pirque, Fase II), con una inversión de US$115 millones.
• Construcción de un nuevo embalse, denominado Coyanco, conducción hasta el Estanque Pirque, con una inversión de US$ 238 millones.
• Reciclaje de agua, mediante la regeneración de aguas tratadas en las plantas de tratamiento de aguas servidas de Aguas Andinas, lo que demandaría US$ 500 millones.
• Conducción desde el Embalse El Yeso hasta el Estanque Pirque, por US$ 410 millones.