Con el 10% de cada depósito que llegaba a su cuenta se quedaba el teniente coronel de Carabineros, Mauricio Saldaña Vidal, uno de los oficiales de la institución que fueron dados de baja tras conocerse el millonario desfalco dentro de la policía uniformada.
Según consigna La Segunda, la propia indagatoria a Saldaña Vidal reveló que recibía un pago por cada transacción que era depositado en su cuenta, cuyo monto correspondía al 10%.
Otro tema importante fue que entregó el nombre de quien lo contactó para formar parte de la red de oficiales y suboficiales que prestaban sus cuentas corrientes para defraudar a la institución.
El oficial dio cuenta que en 2010 su esposa se enfermó de cáncer y el mismo mal afectó a su hija, por lo que un funcionario de Intendencia de Carabineros le ayudó realizando diversas colectas.
Sin embargo, explica que a cambio le solicitó la devolución del favor concedido, pidiéndole que le prestara su cuenta corriente para recibir entre 40 y 50 millones de pesos, montos por los que podría acceder al 10% por cada depósito que recibía.
De esta forma, los primeros traspasos comenzaron en 2013, saliendo de las glosas “bono” y “viáticos”.
La nota señala que entre 2013 y 2015, el teniente coronel Saldaña recibió unos $300 millones y que el 90% de esas cifras las entregaba en efectivo en bolsos al oficial que lo ayudó y que se retiró de la institución el año pasado.
Luego de declarar en el sumario interno, Saldaña presentó su renuncia a Carabineros, pero no fue aceptada, siendo finalmente expulsado el pasado 6 de marzo.