• Ruidos fuertes: Quizás no lo sepas pero poner a todo volumen tu música, más cuando es algún género como el rock o heavy metal puede causar mucho estrés en tu mascota. De igual forma usar de forma excesiva el pito de tu carro, la pólvora y por supuesto los gritos.
• Saludar con gritos: No grites o hagas ruidos fuertes al conocer a una mascota ya que puedan asustarla. También sonidos de ambulancias o carros de bomberos.
• Pólvora: El sonido es un factor determinante para el nerviosismo del perro frente a los juegos artificiales, estudios indican que entre el 10 y 20% de los perros pueden desarrollar miedo a los fuertes sonidos de la pólvora.
Además de otros factores, ya sean hereditarios o aprendidos, que estimularán la respuesta defensiva o temerosa frente a los juegos artificiales.
• Regaños y abuso físico: Muchas mascotas especialmente las abandonadas son un ejemplo de este tipo de trauma. Muchos perros y gatos se les dificulta encontrar hogar dado a los miedo dejándonos por el abuso físico mental
• Dejarlas solas en casa por mucho tiempo: Dejar a tu mascota más de dos días puede causar un extremo miedo a la soledad, más cuando la mascota es dejada sin alimento o las condiciones actas para estar bien puede generarse un trauma.
• Relámpagos y lluvia: El temor en tu perro es una característica instintiva de todos los animales, además ellos perciben la presencia de la lluvia debido a su desarrollada capacidad auditiva que los alerta cuando las gotas de agua caen al suelo.
Durante una tormenta tu perro puede desarrollar un ataque de estrés, debido a que lo niveles de la hormona cortisol, que estimulan el estrés, aumentan en un 200%.
