A contar del viernes de esta semana los vuelos de Sky Airline no tendrán comida a bordo, o al menos no como se conocía hasta ahora. Se trata del primero de una serie de pasos con que la aerolínea fundada por el empresario Jürgen Paulmann busca transformarse en una compañía de bajo costo, como las que operan actualmente en Europa y Estados Unidos.
Junto con retirar el servicio de comida e implementar uno de pago, la aerolínea planea vender tramos a menos de $10 mil y viajes más largos en cerca de $30 mil más tasas de embarque. «Ofreceremos pasajes a tarifas de bus, e incluso más económicas si las compran con anticipación. Cuando se viaja en verano a Temuco en bus se paga cerca de 30 a 40 mil. Si compras con anticipación con nosotros, pagarás menos de eso por la ida y vuelta», aseguró Paulmann.
La compañía también estudia cobrar por equipaje y la reserva de asientos ubicados en filas delanteras o cerca de las salidas de emergencia.
El modelo busca ser sustentable, económicamente viable y más fuerte frente a factores como el valor del combustible o el tipo de cambio, según explicó el sucesor de Jürgen, Holger Paulmann —en la foto—, a El Mercurio.
