“Me encanta la belleza y la perfección del mar,” dijo Swann a Mymodernmet. “Los cetáceos son el epítome de eso, y nada es más perfecto que un cetáceo bajo el agua, pero las ballenas son especiales. Ver animales tan enormes pero llenos de gracia, tan relajados y en comunión con su ambiente, es exquisito.”
El fotógrafo lleva años organizando viajes por el mundo para observar a delfines y ballenas, pero ha decidido dejarlo para dedicarse exclusivamente a sus asombrosas fotos. Estas sirven para recordarnos que, a pesar de su tamaño, estas tranquilas criaturas tienen el poder de infundirnos una gran sensación de paz.
Para conocer más de su trabajo visita: http://www.oceanus.uk.com/christopher.html