En entrrevista con El Mercurio, fechada 8 de diciembre de 2013, la entonces vicepresidenta del PS Isabel Allende aseguró: «Yo no creo que seamos un eje DC-PS: somos una Nueva Mayoría que está integrando nuevos componentes que son todos importantes para nosotros. Queremos expresar una diversidad, incorporar rostros nuevos o que están en otras fuerzas, que están en otros partidos«.

A tres años de esas declaraciones, el también socialista y presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade, llama a retomar la coordinación de ese eje oficialista.

«Si el gobierno no logró ordenar a la Nueva Mayoría, habrá que instalar un nuevo orden, incluso para La Moneda», sentenció en una reunión que congregó en una cena a un reducido grupo de parlamentarios de su partido y la DC.

Según consigna La Tercera, al encuentro asistieron los diputados Marcelo Schilling (PS), Daniela Cicardini (PS), Aldo Cornejo (DC) y Gabriel Silber (DC).

De acuerdo a las fuentes consultadas por el matutino, Andrade los convocó unos días antes con el objetivo de retomar un trabajo político conjunto del eje histórico PS-DC.

“No fue una reunión institucional, de directivas o de bancadas”, dijo uno de los comensales.

Andrade había adelantado a su bancada sus intenciones de convocar una reunión para analizar el rol del gobierno y buscar apoyos a la gestión de la Presidenta Michelle Bachelet para lo que resta de gestión.

De igual modo, anticipó que continuará convocando a este tipo de encuentros y que, incluso, extendería invitaciones a algunos ministros.

“Nos juntamos para intercambiar opiniones sobre la situación actual, preocupados por el deterioro de la unidad de la coalición y del apoyo social a la Presidenta. Vamos a poner nuestros mejores esfuerzos para tratar de ayudar a superar la situación”, declaró el diputado Schilling.

Durante la cita, Andrade hizo un diagnóstico del momento “complejo” que vive el gobierno y, como ejemplo, recordó los resultados de la encuesta Cadem, donde Bachelet aumentó su rechazo en cuatro puntos respecto a la última medición, instalándose en 73%, mientras que su aprobación disminuyó a un 21%.

Por esa razón, a su juicio, la DC y el PS deben retomar su coordinación política de mira a las elecciones presidenciales 2017.

Por su parte, los parlamentarios de la falange hicieron hincapié en que hasta ahora el bloque solo ha figurado públicamente por temas que generan división con la DC, como la reforma laboral y educacional, o el proyecto que despenaliza el aborto en tres causales. Por tal motivo, llamaron a articular temas que permitan “aglutinar” las fuerzas.