Anoche, el Ministerio del Interior convocaba con bombos y platillos una actividad para la mañana de este miércoles en la que darían cuenta de los detalles de un operativo del OS-7 de Carabineros que había desarticulado una peligrosa banda narco chileno-colombiana saldado con 11 detenidos.
Sin embargo, poco antes del inicio de la misma, fijada a las 7.30 de esta mañana, se anunció sin mayores explicaciones que las autoridades ministeriales y del gobierno regional se bajaban masivamente de la actividad. Así, se cancelaba la asistencia de la ministra del Interior, Carolina Tohá; los subsecretarios del Interior, Luis Cordero, y de Prevención del Delito, Eduardo Vergara; y el delegado presidencial Metropolitano, Gonzalo Durán.
La razón era simple: 4 de los detenidos protagonizaron una fuga desde la 41ᵃ Comisaría pasadas las 23:00 de ayer. Uno pidió permiso para ir al baño y, mientras le abrían la reja, se abalanzaron otros tres detenidos para reducir al custodio del calabozo. Uno de los hombres fue capturado en el patio del recinto policial. En tanto, los otros tres escaparon por calle Baldomero Lillo, en donde dos fueron recapturados por los policías.
Uno de ellos recibió un disparo en el hombro, por lo que fue llevado al Hospital Sótero del Río. Dicho sujeto sería el actual líder de la banda, conocida como los «Váster Miller»
Finalmente, el cuarto individuo se mantiene prófugo. Se trataría de un hombre identificado como Alexander Palominos.
Ante la ausencia de las autoridades, quien salió a dar escasas explicaciones fue el General Director de Carabineros, Marcelo Araya, quien encabezó esta historiada pauta de prensa, y ante la consulta señaló simplemente que “no me corresponde a mí dar cuenta de eso”.