El Senado aprobó, por 43 votos a favor, 1 en contra y 1 abstención, los siete puntos planteados en el veto presidencial al proyecto de elecciones en dos días, por lo que quedó listo para ser analizado por la Cámara de Diputados.
El veto aprobado consta de siete puntos: 1 veto sustitutivo, 3 vetos supresivos y 3 vetos aditivos, siendo el primero el que apunta a que los partidos políticos, los pactos electorales, los candidatos o los cinco ciudadanos patrocinantes de una candidatura independiente tengan plazo hasta las 72 horas siguientes del plazo para incorporar la documentación y antecedentes en la plataforma electrónica del Servicio Electoral (Servel).
El segundo y tercer punto se refieren a la regulación de las redes sociales y que se hacen cargo de la forma especial en cómo se calcula la tarifa en redes sociales, consagrando el principio de que no se puede cobrar diferenciadamente de acuerdo al partido político, amistad o cercanía del candidato en relación al dueño del medio respectivo.
El cuarto punto suprime la derogación del feriado irrenunciable, mientras que el quinto hace una corrección de forma. En el sexto punto se suprime la realización de la votación en dos días, siendo repuesta en el séptimo punto, fijando una multa de 0,5 UTM (unos $33 mil) por no sufragar, realiza un ajuste al aporte en las campañas y establece que sólo el domingo sería feriado irrenunciable.
Los senadores Manuel José Ossandón (RN) y Ricardo Lagos Weber (PPD), presidentes de la Comisión de Gobierno y de Hacienda, respectivamente, dieron a conocer los principales aspectos de la iniciativa, coincidiendo en que el veto presidencial plantea una «buena solución» y una «fórmula intermedia» para los problemas que se registraron durante la tramitación del proyecto.
Se destacó que se haya consagrado el feriado irrenunciable del día domingo y se señaló que el monto de la multa de 0,5 UTM, es decir, cerca de 33 mil pesos, es la misma que se ha aplicado en otros procesos eleccionarios.
Asimismo, hubo amplia coincidencia en que es importante consagrar la obligatoriedad del voto (sólo la senadora Campillai se manifestó en contra de ello), pero se instó a que el Ejecutivo envíe la reforma electoral que se ha anunciado para evitar estar discutiendo estos temas a dos meses de los comicios.
Algunos senadores manifestaron sus aprensiones respecto de lo que puede suceder en el mundo rural donde hay más dificultades de transporte, pero el ministro de la Segpres, Álvaro Elizalde explicó que hay disposiciones legales que apuntan a solucionar esos problemas.