El machi Celestino Córdova, quien está condenado a 18 años de prisión por el alevoso crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay, abandonó durante la madrugada de este jueves el Centro de Estudios y Trabajo (CET) de Vilcún, quedando en libertad condicional tras lo determinado por la Corte de Apelaciones de Temuco y pese al intento del Gobierno para evitar la liberación del condenado.
Consignar que la Corte de Apelaciones de Temuco determinó el martes pasado dejar en libertad condicional a Córdova por el cumplimiento de condena, debido a que estimaron que cumple con todos los requisitos legales exigibles para cumplir el saldo de la pena impuesta en el medio libre.
La salida del machi desde el centro de reclusión se concretó esta madrugada a pesar del recurso de apelación presentado el miércoles por el Gobierno, la cual incluía una orden de no innovar para que no se le otorgara la libertad mientras se tramitaba la acción.
También recordar que el ministro (s) del Interior, Manuel Monsalve, dijo que “el Gobierno ya ha presentado una apelación a la Corte de Apelaciones y en estos momentos, muy probablemente en los próximos minutos, se presentará una solicitud de orden de no innovar”.
En ese sentido, aseguró que el Gobierno hará “todo lo que esté a su alcance” para poder revertir la decisión de libertad condicional y que Córdova regrese al centro penitenciario, lo cual de ocurrir se produciría un escenario complejo para intentar que las policías concurran a la comunidad mapuche donde permanece para capturarlo y regresarlo a la cárcel.