Por estos días el ministro de Defensa de Argentina, Jorge Taiana, que se ha caracterizado por «vitrinear» fabricas de armas en todo el mundo no occidental, en India ha visitado la fábrica de misiles BrahMos y firmado cuanto acuerdo le permitiría mejorar su capacidad militar ¿con qué fin?, y ahora -también en India- firmó una carta de intención para avanzar en la incorporación de helicópteros militares para las FFAA junto con otras tecnologías para la la ciberguerra.
«Continuando su gira por la India, el ministro de Defensa, Jorge Taiana, se trasladó hacia la ciudad de Bangalore donde visitó las instalaciones de la empresa Hindustan Aeronautics Limited (HAL) para firmar una carta de intención de cooperación productiva con el fin de renovar la flota de helicópteros Utilitarios Livianos y Medianos para las Fuerzas Armadas», señala una nota oficial del ministerio de Defensa argentino.
Durante su última jornada en el país asiático, el titular de Defensa también mantuvo un encuentro con representantes de IDEX India, una organización que nuclea a distintas empresas “startups” dedicadas al desarrollo y la innovación tecnológica para la Defensa.
Al culminar la gira por India, Taiana señaló: “Estas actividades sumadas a las reuniones bilaterales llevadas a cabo con el ministro de Defensa han permitido fortalecer los lazos de confianza y cooperación entre ambos países, al tiempo que han proporcionado una plataforma para desarrollar nuevas oportunidades de trabajo en conjunto en el ámbito de la defensa”.
También estuvo presente el secretario de Asuntos Internacionales para la Defensa, Francisco Cafiero; el embajador de Argentina ante la India, Hugo Javier Gobbi y el embajador Extraordinario y Plenipotenciario de la India, Dinesh Bhatia.
Claramente la Argentina busca rearmarse con material de donde venga, menos de EEUU porque podría incorporar a su Fuerza Aérea aviones de China, ahora helicópteros de combate indios, otros artefactos coreanos e incluso de Rusia. Además de drones de guerra azerbaiyanos e iraníes, todo en un contexto de reivindaciones territoriales que abarcan a casi todos sus países fronterizos, la aspiración sobre las Falklands y sobre la Antártica Chilena y parte del Mar Austral Chileno.