viernes, noviembre 22, 2024

La incertidumbre se cierne sobre el corredor de Zangezur mientras persisten las disputas entre Armenia y Azerbaiyán

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Por: Vasif Huseynov, Investigador Principal del Centro de Análisis de las Relaciones Internacionales (Centro AIR), Bakú, Azerbaiyán.

A fines de febrero de 2023, la Agencia Estatal de Carreteras para Automóviles de Azerbaiyán anunció que se completó el 73 por ciento de la carretera Horadiz-Jabrayil-Zangilan-Agbend (News.az, 28 de febrero). Está previsto que esta carretera, que se extiende hasta Agbend, la ciudad más occidental de Azerbaiyán continental, se conecte con el Corredor Zangezur. La construcción de la nueva carretera se inauguró con una ceremonia de inauguración el 26 de octubre de 2021, en la que participaron tanto el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, como el presidente de Türkiye, Recep Tayyip Erdogan (ver EDM, 28 de enero de 2022). También se está construyendo una línea ferroviaria a lo largo de la misma ruta y, según las últimas actualizaciones de las autoridades de Azerbaiyán en diciembre de 2022, se ha completado el 40 por ciento del trabajo en este proyecto (Caspiannews, 16 de diciembre de 2022; ver EDM, 21 de abril de 2022). 2021). Según Aliyev, Azerbaiyán planea completar ambos proyectos el próximo año (Caspiannews, 16 de diciembre de 2022). Sin embargo, mientras Azerbaiyán está desarrollando su parte del Corredor Zangezur, el trabajo en la sección armenia de la ruta, desde Agbend a Nakhchivan a través del territorio del sur de Armenia, aún no ha comenzado. Esto, sumado a las complejidades geopolíticas y las disputas en curso entre Bakú y Ereván, crea una incertidumbre que continúa cerniéndose sobre el proyecto.

“El Corredor Zangezur es una necesidad histórica”, argumentó Aliyev en una entrevista con los canales de televisión locales en enero de 2023, y agregó que el proyecto “se llevará a cabo, Armenia lo quiera o no” (President.az, 10 de enero). De acuerdo con la declaración trilateral negociada por Rusia del 10 de noviembre de 2020, Armenia no se ha opuesto a abrir la ruta, pero rechaza la «lógica del corredor» inherente al proyecto. Específicamente, el gobierno del primer ministro armenio Nikol Pashinyan quiere que tanto las conexiones de carreteras como las ferroviarias estén bajo control armenio y sujetas a la legislación y regulación armenias (Arka.am, 14 de septiembre de 2022). Esto significaría el establecimiento de puestos de control a lo largo del Corredor Zangezur donde entra y sale del territorio armenio.

Desde que comenzaron las conversaciones sobre la reapertura de las rutas de transporte en la región, el tema de los puestos de control ha sido una consideración difícil en las negociaciones. Antes de su primera reunión mediada por la Unión Europea con Pashinyan en Bruselas el 14 de diciembre de 2021, Aliyev declaró que Azerbaiyán solo podría aceptar los términos de Armenia si también se aplicaba un estándar igualmente restrictivo al Corredor Lachin (ver EDM, 28 de enero de 2022). La carretera de Lachin conecta físicamente a Armenia con la región de Karabaj y actualmente está bajo el control de la fuerza rusa de mantenimiento de la paz allí (ver EDM, 19 de enero de 2023). Tales regulaciones restrictivas podrían aplicarse a la carretera trans-Zangezur solo si también se aplican al Corredor Lachin, declaró Aliyev (ver EDM, 28 de enero de 2022). Aun así, desde hace más de un año, se ha avanzado poco en estas negociaciones.

En una entrevista el 18 de febrero, que siguió a una reunión con el primer ministro armenio (y fue moderada por el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken), Aliyev reiteró su posición: “Se deben establecer puntos de control en ambos extremos del Corredor Zangezur y en la frontera entre el distrito de Lachin [de Azerbaiyán] y Armenia” (President.az, 18 de febrero). Varios días después, el ministro de Relaciones Exteriores de Armenia, Ararat Mirzoyan, dijo a los periodistas que Ereván no aceptaría una renegociación de las regulaciones relacionadas con el Corredor Lachin (1lurer.am, 22 de febrero). Criticando la reacción negativa de Armenia a la propuesta de Aliyev, el ministro de Relaciones Exteriores de Azerbaiyán, Jeyhun Bayramov, indicó que la propuesta había recibido evaluaciones positivas de «socios internacionales» no especificados (Apa.az, 24 de febrero).

Sin embargo, está claro que Rusia está en contra de la idea de los puestos de control a lo largo de la carretera de Lachin. En el curso de su última visita a Bakú, que tuvo lugar después de la declaración de Aliyev, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, dijo a los periodistas que «no está previsto crear ningún puesto de control fronterizo» a lo largo de la carretera de Lachin, insistiendo en que el régimen y la función de la carretera “debe ser totalmente consistente con la primera declaración trilateral: la declaración del 9 al 10 de noviembre de 2020” (Apa.az, 28 de febrero). Lavrov propuso la instalación de «medios técnicos» para inspeccionar los envíos que pasan por el corredor con la esperanza de calmar las preocupaciones de Azerbaiyán sobre el uso del Corredor Lachin por parte de Armenia con fines militares y otros fines no humanitarios.

En verdad, Rusia tiene razones claras para oponerse a la creación de puestos de control en el Corredor Lachin. El establecimiento de puestos de control y control azerbaiyano en esta zona reduciría la influencia relativa de Rusia en el sur del Cáucaso y constituiría un paso importante hacia la reintegración de Karabaj con Azerbaiyán. No es inaceptable suponer entonces que Bayramov se refería a la UE y EE. UU. en particular cuando citó el apoyo de “socios internacionales” a la propuesta de Bakú.

Por su parte, la hostilidad de Irán hacia el desarrollo de líneas ferroviarias y viales en el Corredor Zangezur complica aún más las perspectivas del proyecto. Teherán se ha opuesto al proyecto desde el final de la Segunda Guerra de Karabaj en 2020, alegando que interrumpiría la comunicación entre Irán y Armenia (ver EDM, 23 de septiembre de 2022). Aunque Irán tiene una influencia limitada en el sur del Cáucaso para vetar el desarrollo de Zangezur, el apoyo de Teherán a Ereván y la profundización de los lazos de defensa y seguridad de los dos países desalientan a Armenia a cooperar con Azerbaiyán (Moderndiplomacy.eu, 11 de diciembre de 2022). En una conferencia a principios de febrero de 2023 sobre las relaciones entre los dos países, el embajador de Teherán en Ereván declaró que Irán y Armenia no permitirían la creación de tal “corredor” (Sputnik Armenia, 9 de febrero). Y en octubre de 2022, en una ceremonia para abrir un consulado en la ciudad de Kapan, en el sur de Armenia, el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Hossein Amir-Abdollahian, dejó en claro que Teherán se opone a cualquier “cambio geopolítico” en la región (Hetq.am, 21 de octubre de 2022).

En última instancia, las negociaciones sobre el desbloqueo de los enlaces de transporte regionales se han complicado por una serie de factores, a saber, los desacuerdos entre Bakú y Ereván sobre el régimen legal de los corredores de Zangezur y Lachin. Además, el apoyo de Rusia e Irán a la posición de Armenia contra la creación de puestos de control a lo largo de la carretera de Lachin, así como el debate sobre Zangezur, complica aún más el panorama. Por lo tanto, en estas circunstancias, los esfuerzos de Bakú y Ereván por establecer una estabilidad duradera en la región pueden perder la ventana de oportunidad que surgió después de la Segunda Guerra de Karabaj.

Fuente: The Jamestown Foundation

“Las opiniones de autores, agencias y columnistas aquí publicadas y emitidas son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y NO representan el pensamiento o la línea editorial de Infogate.cl ni de sus editores ni representantes legales”. 

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