Este sábado, en la localidad de Cuchumuela, un molesto Evo Morales anunció una nueva demanda contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya por el uso de las aguas del río Silala.
Evo emplazó a las autoridades chilenas a la localidad: «Si la presidenta si alguna autoridad no conocen Silala la siguiente semana invito estaré en Silala para demostrar que no es río internacional sino son aguas de bofedales».
«Pero ahora hermanas y hermanos he decidido, hemos decidido no sólo hacer demanda por la salida al mar con soberanía, hemos decidido ahora como no nos quiere resolver Chile sobre aguas de Silala en el departamento de Potosí, hemos decidido igual como un país pacifista vamos acudir a La Haya para que Chile respete nuestra agua en Silala, en el departamento de Potosí», dijo el Presidente Evo Morales ante una muchedumbre en el municipio de Cuchumuela, Cochabamba.
Según Evo, las aguas del Silala nacen en territorio boliviano andino, «las aguas del manantial Silala abastecen sin contraprestación alguna hace más de 100 años a varias ciudades del norte de Chile y merced a un tratado de derecho privado, el curso de agua fue conducido al norte chileno por un sistema de acueductos artificial», sostiene.
Morales argumentó que Bolivia tiene de su parte la legalidad, el derecho internacional y la razón para dar ese paso, más aún cuando Chile -dijo- quiere confundir al señalar que las aguas del Silala se encuentran en el Tratado de 1904.
Indicó que desde que era dirigente cocalero, luego diputado y en la actualidad Presidente visitó el Silala por lo que conoce muy bien que se trata de un manantial y no de aguas internacionales como aduce Chile, para aprovechar su caudal, señala un cable de la oficialista agencia ABI.
Uno de los factores que habrían gatillado la dura reacción de este sábado de parte del PResidente boliviano sería la declaración que hizo el «Viernes Santo» es el canciller de Chile, Heraldo Muñoz, quien presentó un mapa que se adjunta al Tratado de 1904, en el que se define al manatial del Silala, como un río internacional.
«Este mapa es un antecedente muy importante para nosotros, porque Chile siempre ha defendido la integridad del Tratado de 1904 que fijó las fronteras de manera definitiva entre ambos países», explicó Muñoz, según una nota publicada por Prensa Latina.
Morales retrucó a Muñoz señalando que es un «error» recurrir a ese documento, ya que cuatro años después se pidió permiso a la entonces Prefectura de Potosí para hacer uso de las aguas: «En 1908 Chile ha pedido a la Prefectura de Potosí permiso para tener una concesión y con esa agua del Silala mantener tren o ferrocarril, las locomotoras con esas aguas», aseguró visiblemente molesto Morales.
Morales aseguró que «lo que debe hacer Chile es reconocer lo que nos está robando agua del departamento de Potosí. Estamos con la razón, estamos por la justicia y por eso ahora que Chile quiere confundir, por lo que con más razón, con más fuerza, y con más documentos vamos a presentar la demanda ante La Haya para sentar soberanía sobre las aguas del Silala».
Claramente Evo Morales ha venido estudiando hace tiempo la factibilidad técnica de una nueva demanda ante la CIJ, lo que deteriora aún más las ya débiles relaciones entre Bolivia y Chile.