• A pesar que el ruido interno o del entorno puede ser parte del ejercicio, es posible lograr una práctica más pacífica y efectiva a través de estas recomendaciones.

La meditación permite mejorar el enfoque y la concentración a lo largo del día. En algunas ocasiones es difícil concentrarse porque la mente tiende a distraerse. Pero esos pensamientos acelerados no son las únicas interrupciones que pueden afectar esta práctica diaria, hay muchas otras distracciones externas que también influyen para no lograr ese momento de paz y calma.

Bajo ese contexto, Fitbit entrega 5 consejos que pueden ser un gran aporte para calmar el ruido interno y externo, y así, lograr una práctica más pacífica y efectiva.

1. Elige el momento adecuado. A pesar que la meditación matutina puede ser una excelente manera de ponerse en tierra antes de un día ajetreado, no es el momento ideal para todos debido a que muchas están pensando en todo lo que necesitan lograr durante el día. Por ello, Fitbit recomienda meditar después de lograr algunas tareas pendientes o tal vez en la tarde o noche.

• Preparación previa. Crear un espacio tranquilo y sereno puede contribuir en gran medida a minimizar las distracciones. Por ejemplo, si se vive con otras personas, es importante comentarles el tiempo a tomarse para meditar y que no se estará disponible. En algunas ocasiones se sienten  sonidos digestivos molestos, en ese caso, lo ideal es considerar meditar con el estómago vacío o antes de beber café o té que estimulan la digestión.
  
  Encuentra la posición correcta. No necesariamente la mejor manera de practicar es sentarse en el suelo con las piernas cruzadas. La posición ideal es aquella en la que se está alerta y relajado, por lo que es útil estar erguido. También se puede elegir un cojín adecuado o usar un banco de meditación.

• Tener en cuenta. En lugar de tratar de desterrar los pensamientos intrusivos, lo ideal es reconocer brevemente la interrupción y luego redirige tu atención a tu práctica.
  
  Consigue un ancla. Un ancla es un punto de enfoque donde se puede dirigir la atención. Por ejemplo, la sensación de la respiración que entra y sale de la nariz, el movimiento del estómago al inhalar y exhalar, o el sonido de una vela parpadeante. Si no se puede  dejar de pensar en algo mientras se trata de meditar, una ayuda es volver a centrar la atención en el ancla.

Cabe señalar que las distracciones también son parte el ejercicio, porque lo ideal es intentar pensar en ellas desde una nueva perspectiva. Todo el proceso de la meditación consiste en observar estos pensamientos sin dejar que la atención quede atrapada en ellos.

Es importante también apoyarse de herramientas que entreguen una guía y con Fitbit Premium es posible tener acceso a un sin número de meditaciones enfocadas a trabajar distintos puntos como: meditaciones antiestrés, meditaciones para conciliar el sueño, sonidos relajantes, entre otras.

Estos programas sin una guía y permitirán de a poco alcanzar la relajación y enfoque necesario. Además, con los dispositivos Fitbit es posible analizar todas las mejoras obtenidas en cuanto a la salud y calidad de sueño.

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