Desde que se mencionó por primera vez en un documento técnico de 2008, Bitcoin ha causado debate y ha sido noticia. El debut de la criptomoneda es anunciado por sus partidarios como el comienzo de un nuevo sistema monetario justo. Los críticos condenan severamente su existencia debido a su uso en operaciones ilegales y falta de legitimidad legal. Mientras tanto, los gobiernos de todo el mundo observan con cautela el crecimiento de Bitcoin.
Algunas naciones lo han adoptado como dinero, como El Salvador. Sin embargo, las principales economías, como EE. UU., se niegan a aceptarlo como efectivo legal. Lo hacen por razones válidas. Bitcoin, entre otras cosas, brinda a los residentes de una nación la capacidad de desafiar la legitimidad de su gobierno al evadir los controles de capital establecidos por este. Al ayudar a los delincuentes a evitar la captura, también promueve las malas acciones. Por último, pero no menos importante, Bitcoin tiene la capacidad de interrumpir y desestabilizar el sistema de infraestructura financiera actual al eliminar intermediarios.
¿Por qué Bitcoin preocupa a los gobiernos?
Todavía está en debate si el mundo libre de estados y regulaciones que los defensores de Bitcoin imaginan realmente se materializa. Actualmente, los gobiernos están tratando de comprender cómo las criptomonedas pueden afectar su economía en un futuro cercano. Están luchando específicamente con los tres problemas que presenta la presencia de Bitcoin.
● Bitcoin puede ir más allá del control de capital establecido por el gobierno:
Los gobiernos con frecuencia promulgan controles de capital para frenar las salidas de divisas, ya que las exportaciones pueden hacer que el valor de la moneda disminuya. Algunos ven esto como otra forma en que los gobiernos manipulan la política económica y presupuestaria. El hecho de que bitcoin sea una moneda sin estado puede ser útil en ciertas situaciones para sortear las regulaciones de capital y exportar dinero.
China ha visto uno de los usos más conocidos de Bitcoin para la fuga de capitales. Se impone un tope anual de $50.000 a la compra de divisas por parte de nacionales. En 2020, más de $ 50 mil millones se movieron de billeteras de bitcoin con sede en China a billeteras en otras naciones, según un informe de la empresa de criptoforense Chainalysis. Esto indica que los ciudadanos chinos pueden haber convertido su moneda local a bitcoin y haberla transferido a través de las fronteras para evadir la regulación gubernamental. Cada vez más países también se están moviendo hacia las transacciones de bitcoin y el comercio a través de bots como multimillonario bitcoin.
● Bitcoin fomenta actividades ilegales:
para los delincuentes, la capacidad de eludir el sistema financiero actual de una nación es una bendición disfrazada porque les permite ocultar su participación en tales operaciones. Los usuarios de la red Bitcoin solo pueden ser reconocidos por sus direcciones de red porque es una red seudónima. Puede ser un desafío determinar el origen de una transacción o la persona o empresa detrás de la dirección. Además, la confianza algorítmica creada por la red Bitcoin elimina el requisito de conexiones confiables en cualquier extremo de una transacción ilícita.
Como era de esperar, Bitcoin es el método de pago preferido por los delincuentes. El caso de Silk Road es el caso más conocido de un crimen de bitcoin. En pocas palabras, Silk Road era un mercado de la Dark Web que vendía narcóticos, armas y otros artículos ilegales. Los usuarios podrían usar bitcoins para realizar pagos. El comprador no confirmó la recepción de los productos hasta que se liberó el bitcoin del depósito en garantía. Debido a que las personas involucradas en la transacción solo podían ser identificadas por sus direcciones de cadena de bloques, fue un desafío para las fuerzas del orden encontrarlas.
● Falta de regulación:
a pesar de que Bitcoin se estableció hace más de diez años, los gobiernos de todo el mundo todavía intentan controlarlo. El problema con la regulación de bitcoin es complicado.
Por ejemplo, las percepciones cambiantes de la utilidad de Bitcoin han agravado los problemas relacionados con la mejor institución gubernamental para monitorear la criptomoneda, la terminología que se utilizará para desarrollar leyes e incluso la metodología para crear leyes.
¿Bitcoin es un medio de intercambio destinado al uso diario o es un activo de reserva utilizado principalmente para inversiones? ¿Es Bitcoin un activo de refugio seguro durante los períodos de turbulencia económica en todo el mundo? Tanto el supuesto especialista en Bitcoin como el típico inversionista de Bitcoin parecen estar en la oscuridad.
Se puede argumentar que el hecho de que Bitcoin se utilice en productos de inversión como los futuros es una prueba de su atractivo para los comerciantes. Aunque ninguno de los principales intercambios de criptomonedas que fijan el precio de Bitcoin para los mercados de futuros está registrado en la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), los mercados subyacentes para dichos derivados no están regulados.
● BTC es en gran medida un ecosistema opaco:
Bitcoin todavía tiene una serie de problemas, a pesar de su capacidad para alterar la dinámica establecida del ecosistema financiero actual. La desconfianza del gobierno hacia las criptomonedas puede explicarse en parte por el miedo y en parte por la falta de información sobre su ecología. Estas últimas preocupaciones son legítimas.
El vínculo de causa y efecto entre el precio de bitcoin y los eventos mundiales no se comprende bien. Dadas las fluctuaciones erráticas de los precios de la criptomoneda, ese es un punto crucial. Su evolución como clase de activo se ha caracterizado por una serie de estafas. La SEC declaró en una carta de enero de 2018 que existen varios problemas con el funcionamiento de los intercambios de criptomonedas, que van desde la falta de transparencia hasta la existencia de ballenas bitcoin.
Conclusión:
los gobiernos son escépticos, si no temerosos, de Bitcoin y oscilan entre denunciarlo e investigar cómo se puede utilizar para sus propios fines. Bitcoin seguirá siendo visto con recelo por las autoridades establecidas hasta el punto en que su ecosistema alcance la madurez. El ecosistema de bitcoin todavía está lleno de escándalos y delincuentes, a pesar de su capacidad para descentralizar y alterar el funcionamiento del sistema financiero actual. Bitcoin seguirá despertando la desconfianza y las críticas de las autoridades establecidas hasta el punto en que su ecosistema madure y se descubra un caso de uso importante.