La Ministra de Asuntos Exteriores del Reino Unido, Liz Truss, en su discurso en Mansion House dado este miércoles 27 de abril, abogó por un «reinicio» en el enfoque del mundo libre para combatir a los agresores globales a raíz de la crisis de Ucrania. 

«La victoria de Ucrania es un imperativo estratégico para todos nosotros»

Argumentó que la guerra debería ser un catalizador para «reiniciar, remodelar y refundir» una arquitectura de seguridad global que «le ha fallado a Ucrania». Elogiará la fuerza y ​​la unidad en la respuesta del mundo libre a la invasión de Putin, pero argumentará que se debe seguir adelante para garantizar que los agresores fracasen y sean contenidos en el futuro. 

Truss señaló que «necesitamos aprender las lecciones de Ucrania y pedirá un nuevo enfoque… uno “que combine la seguridad dura y la seguridad económica… uno que construya alianzas globales más fuertes… uno que reconozca que estamos viendo el regreso de la geopolítica», e hizo un llamado a la acción en tres áreas: 

1. Defensa más sólida: basada en mayor inversión colectiva en defensa, corrigiendo una “generación de inversión insuficiente, con el 2% del PIB como piso, no como techo”. Abogará por mantener la política de puertas abiertas de la OTAN (incluyendo a Suecia y Finlandia) y para que la OTAN adopte una perspectiva más global en la que intensifique el trabajo con los socios del Pacífico. 

2. Impulsar la seguridad económica: reducir la dependencia económica de los agresores y crear vínculos comerciales, de inversión, científicos y tecnológicos más fuertes entre aliados y socios. 

3. Construir una red más fuerte de alianzas: con el G7 jugando un papel más fuerte, como lo ha hecho durante la crisis de Ucrania, y construyendo una red más profunda y más entrelazada de alianzas y de seguridad bilaterales. 

Argumentó que la acción en estas áreas puede brindar su visión de «un mundo donde las naciones libres son asertivas y están en ascenso… donde la libertad y la democracia se fortalecen a través de una red de alianzas económicas y de seguridad… y donde los agresores están contenidos y nos dirigimos hacia un mejor porvenir». 

La Ministra de Asuntos Exteriores también advertió que “el destino de Ucrania sigue en juego” e instó a los aliados a redoblar esfuerzos para garantizar que Putin fracase en Ucrania.

«La victoria de Ucrania es un imperativo estratégico para todos nosotros» y argumentó que el G7 y sus socios deben mantener la presión sobre Rusia a través de sanciones más severas, que incluyen «cortar las importaciones de petróleo y gas de una vez por todas», proporcionar más ayuda militar, así como apoyo humanitario continuo. Agregando que «si Putin tiene éxito, habrá una miseria incalculable en toda Europa y terribles consecuencias en todo el mundo», nunca nos volveremos a sentir seguros e instará a los aliados y socios a prepararse para el largo plazo.