La situación en Afganistán y la llegada de los Talibanes al poder en Kabul no ha dejado indiferente al Centro de Cultura Islámica de Las Condes, que congrega a los shiitas que llegaron a nuestro país hace más de un siglo. Ellos se refieren al elicado momento por el que pasa la nación asiática y recuerdan el rol que jugó EEUU en la entronización de estos grupos (Talibanes) que recibieron el apoyo norteamericano.

Más claro imposible. Ellos (EEUU) los crearon y son los responsables absolutos de esta catástrofe afgana actual. El ex presidente Ronald Reagan los recibió en La Casa Blanca y los comparó con la historia norteamericana. Ya pueden escuchar la voz de la misma Hillary Clinton reconociendo la creación de estos extremista que, sin conocer el pensamiento salafita (lo más alejado al verdadero islam), los armaron y sólo han masacrado a los shiitas afganos y destruido monumentos, cementerios y museos bajo su limitado y errado concepto de religión. Como lo plantea un destacado periodista “88 Billones de Dólares en veinte años gastados en entrenar un ejército afgano y colapsó en solo un mes”. Un nuevo fracaso de la política exterior norteamericana con consecuencias mortales para nuestra comunidad shiita afgana que son víctimas de un sinnúmero de ataques terroristas al ser considerados “idolatras” y que ahora con la salida norteamericana las principales ciudades están cayendo a manos talibanas con graves repercusiones políticas y de más refugiados a los paises vecinos.

Además, reuerda que los Talibanes «son quienes decapitaron al IMAM Hussein (a.s.) hace 1400 años. Estos son los Talibanes que en estos momentos destruyen las banderas que recuerdan al Imam en Afganistan. Talibanes, Isis, Frente Al Nusra son exactamente lo mismo ya que son literalistas fanáticos, es decir salafitas, quienes en estos años han oprimido a musulmanes shiitas y a cristianos en Afganistán, Siria e Irak y manejados por los neocon norteamericanos para sus intereses en Oriente Medio. Lamentablemente es el salafismo, fanático e ignorante, el que es, lejos del verdadero islam, el que se difunde en occidente con sus mezquitas financiadas por las corruptas monarquias árabes y que tanto gusta a los políticos y las potencias occidentales por su dinero. Mientras nuestro islam recuerda en estos momentos el martirio del IMAM Hussein, nieto del Profeta del Islam, los talibanes y salafitas en general tratan de ocultar su historia. En estos momentos estos malvados asesinan a nuestros shiitas y el mundo en silencio. Nuestra clara oposición al salafismo. «Y pronto sabrán aquéllos que tiranizaron a qué destino se dirigen», señala la comunidad islámica shiita de Chile