La rápida propagación del virus Zika en suelo latinoamericano y las numerosas interrogantes que aún plantea la transmisión de la enfermedad, han convertido la seguridad médica de los deportistas olímpicos en un asunto de primer orden dentro de la agenda del Comité Olímpico de Chile (COCh)…y es así que evalúan con lupa lo que podría significar asistir a los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro
Arturo Guzmán, gerente del COCH indicó que: “El virus no es una preocupación máxima por estos días. En invierno debería bajar, pero no hay una decisión tomada en términos de no seguir. Supimos de países que están adelantando decisiones, pero no creo que vayan a ausentarse ni nada. La unidad médica está evaluando, levantando recién la información”.
Pero la evaluación, en palabras de Alejandro Orizola, jefe del servicio médico del organismo, aún no vislumbra una opinión definitiva: “Lo más importante que hay que determinar es cómo se da la propagación de este virus. Una vez que conozcamos eso, tomaremos decisiones, que deben ser decisiones país y no personales. Las autoridades de Río no han entregado todavía a los comités ninguna directiva, pero no me parece, en este momento, que la situación sea como para suspender unos Juegos Olímpicos o como para no enviar a una delegación”, manifiesta el especialista, quien calificó la epidemia como “una situación de emergencia sanitaria con un grupo de riesgo bien identificado, que son las mujeres embarazadas, pero cuyas formas de contagio aún se están determinando”.
Para Orizola, que considera poco apropiado que “la Villa Olímpica esté situada frente a una gran laguna” , resulta primordial “conocer las medidas que va a tomar el país organizador para combatir y erradicar la propagación del virus”.
«No renunciaremos a Río»
Zika, definitivamente no va a impedir el concurso de connotados deportistas nacionales como los hermanos Grez en los Juegos de Río, según manifestó uno de ellos, Cristóbal desde EEUU: “No existe ninguna posibilidad de que renunciemos a los Juegos Olímpicos”. La pareja se encuentra en este momento en Clearwater, donde participa en el Mundial de veleros 49er. “En el ambiente náutico no hay mucho temor al virus. Preocupa más la contaminación de la Bahía de Guanabara (que acogerá las competencias de Vela en la cita olímpica), pero aún quedan seis meses y estos temas siempre están relacionados con el clima, así que cuando llegue el momento es probable que ya esté todo solucionado”, agrega confiado el velerista.
