El Presidente Sebastián Piñera retomó la Agenda Antidelincuencia de su Gobierno, anunciando este jueves el “Plan Antiencerronas y Antiportonazos”, con el que busca proteger a las personas tras el aumento de los delitos de este tipo.
Se trata de un amplio programa que surge, en palabras del Mandatario, ante la conciencia «de lo que esto significa en materia de temor e inseguridad para las familias chilenas, y para llevar más tranquilidad y más seguridad a todos quienes transitan por nuestras calles y carreteras, nuestro Gobierno ha preparado un Plan Antiencerronas y Antiportonazos, que incluye estrategia, operación, tecnología y coordinación».
Pero si bien se trata de un anuncio amplio, no deja de llamar la atención que en el fondo se trata de retomar el último gran anuncio que hizo el Presidente en torno a seguridad, hecho el 28 de mayo del año pasado, y que la pandemia y la crisis política causada por la política apoyo económico a la ciudadanía parecían haber dejado de lado (salvo un paréntesis con el acuerdo firmado con los camioneros a fines de septiembre). En suma, estamos ante un nuevo intento de recuperar el control de la agenda por parte del Ejecutivo, esta vez en un tema que va más allá de las conversaciones de mínimos comunes con el Congreso y oposición, y que ha concitado la atención y preocupación de la población.
En este contexto, el jefe de Estado aprovechó la oportunidad de enviar un mensaje a la oposición y al Congreso, al sostener que «la lucha contra la delincuencia, contra el crimen organizado, contra el narcotráfico, contra el terrorismo no es una lucha que debe dividir al Gobierno y al Congreso o que debe dividir al Gobierno y la Oposición o que debe separarnos entre distintas visiones políticas. Es una decisión de Estado y es una lucha que debe unir a la inmensa mayoría de las chilenas y chilenos que queremos vivir en paz, trabajar con honestidad, unirnos para enfrentar a ese puñado de delincuentes que no respetan a nada ni a nadie y que pretenden arrebatarnos nuestra libertad, nuestra seguridad y nuestra paz».
El plan en detalle
Piñera se encargó de detallar el nuevo plan, señalando que se reforzará el sistema de cámaras de seguridad en los 11 puntos más críticos, más peligrosos de la Región Metropolitana, donde se concentran más del 60% de este tipo de delitos.
Además, se hará un reforzamiento de los pórticos lectores de patentes y cámaras en los 35 puntos de la Región Metropolitana que, normalmente, utilizan los delincuentes como vías de escape después de cometer sus delitos. «Esto nos ha permitido agregar 45 nuevos pórticos a la red que ya teníamos en la Región Metropolitana», acotó el Mandatario. Estos pórticos son capaces de leer más de 18 millones de patentes cada mes y están integrados al Servicio de Encargo y Búsqueda de Carabineros y de la Policía de Investigaciones, permitiendo identificar los vehículos robados que están con encargo de búsqueda en el sistema y, en consecuencia, perseguir a los delincuentes y acelerar la recuperación de los vehículos.
En tercer lugar, el plan también incluye un plan operativo especial de Carabineros que, con una nueva estrategia y mediante el uso de helicópteros, drones, vehículos especializados y mayor patrullaje en terreno, busca prevenir encerronas y portonazos y, en caso de ocurrir estos, permitir la detención de los delincuentes a la mayor brevedad. Es así que cuando se produzca una alerta de encerrona o portonazo, estos pórticos van a permitir hacer un seguimiento inmediato de las vías de escape de los delincuentes enviando información en tiempo real a la Central de Comunicaciones de Carabineros y de la PDI, para iniciar y coordinar la acción que permita la detención de los delincuentes.
El plan también incluye la mejora de la iluminación, despeje de terrenos, eliminación de basurales, poda de árboles que dificulten la visión en los lugares de mayor riesgo. También considera la incorporación de inmovilizadores antirrobos en los vehículos nuevos que van a impedir que estos sean robados. De hecho, más del 98% de los vehículos nuevos ya cuentan con estos inmovilizadores antirrobos