A la iniciativa, promovida y coordinada por la Dirección de Vialidad del MOP asistieron el director regional de Vialidad, Francisco Orozco López; el Inspector Fiscal de la Obra, Sergio Araya Guerra; la presidenta de la Directiva de la Comunidad Yagán, María Luisa Muñoz; el director del Museo Gusinde, Alberto Serrano y la arqueóloga del convenio, Paulina Monroy.
En la oportunidad, la comunidad descendiente de yaganes de Puerto Williams, pudo pisar por primera vez suelo ancestral y conocer además, el camino que se construye en la localidad de Caleta 2 de Mayo, avanza hacia el Norte con la finalidad de materializar la tan anhelada conectividad entre Punta Arenas y Puerto Williams, en una ruta bimodal.
La visita, que fue especialmente valorada por los niños y adultos mayores, tiene un especial significado para la comunidad y sus antepasados, así lo expresó una de sus integrantes, Yolanda Valderas, quien señaló que “pudimos recorrer parajes en donde hay vestigios de nuestros antepasados y ver cómo se conectaban en este gran territorio. Visitamos casas pozo, pinturas rupestres, fue una experiencia muy gratificante. Se nota el cuidado que ha tenido para rescatar y aprender de este lugar, que representa nuestra historia. Hoy somos una comunidad, un pueblo vivo y cada momento importante recorrido en este territorio, es de gran valor”.
En este mismo contexto, la familia Balfor manifestó que “para nuestra comunidad, es de gran importancia ser parte activa de estos procesos y estar al tanto del avance de la obra, por eso valoramos la incorporación de un gestor intercultural en el desarrollo de las obras, quien nos mantendrá informados y cumplirá funciones de coordinación a partir de esta iniciativa”.
Por su parte, el director regional de Vialidad sostuvo que “la experiencia vivida con el pueblo Yagán de recorrer su territorio, por donde pasa el trazado del camino Vicuña-Yendegaia, fue extremadamente enriquecedora. Se debe rescatar que la obra se ha ejecutado en el marco del respeto arqueológico y ambiental para proteger el legado de un pueblo que es parte de nuestra historia”.
Cabe mencionar que este camino es parte del gran proyecto para unir Punta Arenas y la Isla Navarino, el cual comenzó hace más de 27 años, como una de las tareas más titánicas de la región.
Hoy sólo restan 35 km para su tan esperada culminación, generando con ello un gran beneficio a los compatriotas que habitan la región más austral de Chile, aportando al país una vía de acceso segura, para acceder a un lugar de tanta importancia estratégica como lo es el Canal Beagle.