Este jueves 3 de diciembre, el Parque El Trapiche abre definitivamente a la comunidad. Así lo anunció el alcalde de Peñaflor, Nibaldo Meza, a cargo de la iniciativa que recuperó este tradicional recinto recreativo. El parque estará abierto inicialmente de jueves a domingo, además de los festivos, entre las 10:00 y las 19:00, bajo estrictos cuidados sanitarios y con llamativas atracciones enfocadas a los visitantes de todas las edades.
“A partir de hoy estamos en condiciones de recibir nuevamente a nuestros vecinos y a todos quienes quieran disfrutar de este hermoso parque. Hemos realizado un intenso trabajo de recuperación, erradicamos un vertedero ilegal de residuos sólidos y a petición de la Seremi de Salud, ahora contamos con una nueva planta de residuos sanitarios, que fue el último paso para devolverlo en condiciones dignas a la comunidad”, explica el alcalde Meza.
En este renovado espacio, ubicado a 30 km al sur poniente de Santiago, se han preparado interesantes propuestas turísticas, con la finalidad de apoyar a los emprendedores, artesanos, productores y artistas locales. Dentro de estas actividades, se encuentran los paseos a caballo, en bicicleta y en kayak por el icónico Estero Aguas Frías. Asimismo, los usuarios podrán recorrer sus senderos y admirar el hermoso Espejo de Agua del Humedal desde el mirador inclusivo.
Además, dentro del parque habrá un muro de escalada, una galería y plaza de las artes, juegos infantiles inclusivos, un bosque encantado y un pueblito, compuesto por 84 emprendedores, donde destacan el jardín cervecero, con productores de cerveza artesanal de Peñaflor; un mercado campesino; una zona de Food Trucks, con comidas típicas y un Anfiteatro, ubicado en un espacio que antes era utilizado para la realización de rodeos y que ahora estará destinado a actividades artísticas y culturales, entre otras.
Por décadas, el Parque El Trapiche fue un tradicional y concurrido balneario al que asistían personas de toda la Región Metropolitana. Eso, hasta el año 1996, cuando la autoridad sanitaria decretó su cierre. Fue la administración del alcalde Nibaldo Meza, que hizo posible la reapertura, gracias a los trabajos de rescate y reparación de sus más de 20 hectáreas.