A dos semanas del plebiscito pareciera que las élites han escuchado poco.  Al día siguiente, todos los partidos se pusieron a hacer cálculos electorales y los pre candidatos se auto destaparon.  El gobierno y el Congreso prosiguieron en su enfrentamiento.  La Moneda sin iniciativa estratégica,  luego de la acusación contra el ex ministro del Interior, navega en círculos.  Obviamente, este no era el escenario de esperanza y cambio que esperaban los millones que votaron por el Apruebo.

Mientras la élite se empantana, la sociedad sigue su marcha: agobiada por la crisis económica, sin superar la pandemia, con un alza de precios sostenida en alimentos.  Miles de familias ven acercarse fin de año en medio de la escasez y la incertidumbre.  Es indudable que el plebiscito descomprimió la presión, pero si no se enfrenta con medidas audaces y efectivas, el malestar puede renacer.  Una nueva etapa institucional podría empezar en abril.  Se iniciaría el proceso constituyente y entraríamos al debate de fondo. Pero faltan casi 5 meses.   

En el horizonte cercano tenemos más de lo mismo.  El segundo 10%, gabinete precario, destape semanal de escándalos.  Sobreactuación presidencial unido a exhibicionismo de algunos parlamentarios, Contraloría asumiendo roles inquisitorios mientras Tribunal Constitucional cada día mas inhibido, defendiendo una constitución que la mayoría quiere cambiar.  En estos días cambiaran los Altos Mandos de las fuerzas armadas y de orden.   No todo es política: tendremos también otra jornada rumbo al mundial

El recuento electoral en EEUU nubla lo que pasa en el barrio: el lunes el congreso peruano votará por la vacancia del presidente Vizcarra.  Hoy asume Luis Arce en Bolivia.  Las viudas de Trump desconcertadas en la región.  

Sensación térmica: la bronca puede renacer

¿Se concretarán las esperanzas depositadas en el Apruebo? También el país espera que la Roja recupere su nivel ofensivo y goleador.  Si no, Rueda va a rodar, no será necesario acusarlo constitucionalmente.  Las familias chilenas, después de meses de encierro, de toque de queda, de precariedades económicas, necesitan alegría y esperanza.  Esperan mas comprensión de sus autoridades, mas eficiencia y menos ego de sus parlamentarios, y si llega algún billete, mejor. 

Entramos a la recta de fin de año, normalmente es temporada de fin de año escolar, PSU ahora llamada «Prueba de Transición para los jóvenes, época de aguinaldos, compras de regalos, fiestas navideñas y anticipo de vacaciones.  Poco de ese espíritu se percibe hoy, y si no se escucha bien lo que la población quiere y necesita, la bronca puede renacer.  Hoy no se ve plan de vuelo, la torre de control esta averiada y el piloto no aparece.

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