Sumer Walser Williams y su marido se despertaron a causa de un visitante ruidoso en su hogar en Carolina del Norte. Era un osezno.
“Escuchamos ruidos fuera de la ventana del dormitorio, que da a una plataforma,” dijo a The Dodo. “Y en cuanto encendí las luces, vimos que había un osezno en la puerta delantera.” La pareja no podía creer lo que veía: el curioso osezno estaba de pie, asomándose a su ventana. Pero no estaban enfadados con él, al contrario, se sintieron encantados e intrigados.
A quién no le hizo tanta gracia que el osezno llegara tan lejos, fue a su madre. Pronto se subió a la plataforma y se llevó a su cría, “regañándolo” por invadir la privacidad de la gente.Williams es madre de 2 niños. Viendo cómo la madre osa reaccionó ante su osezno portándose mal, la mujer lo entendió totalmente.
“Me sentí muy identificada. Es mi experiencia diaria con mis propios hijos. Creo que eso es lo que hizo el vídeo tan genial. Mostraron que algunos aspectos de ser padres no cambian según la especie,” dijo Williams.
Si describiera los que la madre osa le estaba diciendo a su hijo, cree que sería algo como “Te he dicho 100 veces que no molestes a los humanos.”Parece que el pequeño aprendió la lección, porque enseguida se alejaron de allí, dejando a la pareja un recuerdo que podrán contar y enseñar a sus nietos. “Estas visitas son un recordatorio de que nosotros somos tan invitados en sus casas como ellos en las nuestras,” dijo Williams.