Durante más de una semana los municipios de la Región de Valparaíso se han estado movilizando para tomar medidas preventivas ante el próximo fin de semana largo, que coincide con el feriado irrenunciable del viernes 1 de mayo. Ello, ante la posibilidad de que se produzca un aumento del traslado de personas desde Santiago hacia la costa, en especial propietarios de segunda vivienda.

En especial, con esta anticipación intentaron evitar los «tira y afloja» con el Gobierno ocurridos durante Semana Santa para evitar dichos viajes, con medidas que estimaron tardías y, pese a los controles, igual se registró el viaje de alrededor de 40 mil vehículos. En la previa del inicio de mayo, en tanto carabineros ya registró sólo el pasado sábado 25 de abril 644 vehículos cuyos ocupantes no lograron acreditar que su primera vivienda estaba en la región de Valparaíso, por lo que fueron obligados a volver a sus zonas de origen.

Para mayor preocupación, los alcaldes esperan prevenir masivo traslado, en especial porque los dueños de segunda vivienda proceden sobre todo de comunas donde ya se levantó la cuarentena en el Gran Santiago.

En esta ocasión, los alcaldes incluso solicitaron la semana pasada una reunión con el ministro del Interior, Gonzalo Blumel, para coordinar medidas, además de las fiscalizaciones que ya están implementado en sus comunas.

Pero desde el lado del Ejecutivo poco y nada se supo en estos días respecto a esta solicitud o la promulgación de medidas concretas.

Fue recién este lunes, que en respuesta a estas solicitudes, la subsecretaria de Salud, Paula Daza, anunció durante la entrega del balance diario acerca de la pandemia de coronavirus en el país, que a contar de este jueves 30 de abril, a las 18 horas, empezarán a regir cordones sanitarios para el Gran Santiago y el Gran Concepción, los cuales se extenderán hasta las 22 horas del domingo 3 de mayo.

La autoridad recordó, además, que existe una serie de medidas en curso, entre ellas una circular que establece «que las personas no pueden deslazarse a sus segundas viviendas«.

La determinación de la Autoridad Sanitaria se dio a conocer además luego que en una entrevista televisiva, la ministra vocera Karla Rubilar adelantara que el Gobierno se encontraba evaluando medidas similares a las aplicadas durante Semana Santa, ocasión en que se establecieron cordones sanitarios a través de los cuales sólo se podía circular con salvoconducto. Dicha medida tuvo efecto en las regiones Metropolitana, Biobío y La Araucanía, pero implicaron una larga pelea entre los alcaldes y el Gobierno por la demora en implementarlas.

Seguridad a la baja

Otro aspecto que preocupa en las comunas costeras ha sido el aumento de los robos en zonas donde se concentran segundas viviendas.

En varios sectores de diversas comunas han aumentado las rondas de vecinos e, incluso guardias privados, para evitar los hechos delictuales, en sectores tan disímiles como Reñaca y Jardín del Mar en Viña del Mar, Algarrobo o Santo Domingo.

Este aumento de la inseguridad ha ido de la mano con lo dispuesto por el Gobierno en cuanto a decidir que efectivos de las FF.AA. apoyen a Carabineros, aunque desde una segunda línea y con capacidades reducidas (y no adecuadas) para hacer frente a los delincuentes.