Una indignada Jacqueline van Rysselberghe mostró su molestia contra las iniciativas de sectores de la oposición que buscan que el presidente Sebastián Piñera termine anticipadamente su segundo mandato.
Así, señaló que “cuando hay sectores políticos con representación parlamentaria, (…) y piden buscar la fórmula de inhabilitar al presidente o adelantar las elecciones para impedir por secretaría que pueda terminar su mandato, la verdad que eso (…) tiene mucho olor a golpe de Estado”.
Ello, luego de una reunión entre los timoneles de Chile Vamos y el ministro del Interior, Gonzalo Blumel, tras lo cual manifestó que “ha sido una oposición súper dura con la cual no siempre ha sido fácil trabajar para poder encontrar los acuerdos que vayan en pos del beneficio de la ciudadanía, como es el tema de las pensiones, pero siempre creíamos que estábamos frente a una izquierda, -incluso a una oposición de extrema izquierda- democrática”.
Las declaraciones de la presidenta de la UDI atacaron la iniciativa de diputados de la bancada de la Federación Regionalista Verde y Social (FRVS), quienes pidieron a la mesa del Senado aclarar cómo se puede inhabilitar al Presidente de la República ante impedimentos físicos o mentales, lo que abriría una senda constitucional nunca explorada en la historia. El informe quedó a cargo de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.
“Estas prácticas son absolutamente antidemocráticas, son opciones que atentan contra la democracia y que parecen más bien una especie de golpe blanco o cómo lo quieran calificar”, subrayó la senadora, añadiendo que dicho proyecto es “inadmisible, porque Sebastián Piñera podrá ser o no afín a sus ideas, pero es un presidente que fue electo en democracia con amplia mayoría, y que tiene todo el derecho a terminar su período”.
“Para nuestro país sería gravísimo que la democracia y el Estado de Derecho se quebrantara mediante acciones de una mayoría circunstancial”, recalcó.
En tanto, el presidente de Renovación Nacional, Mario Desbordes, afirmó que “dejamos muy en claro que no vamos a tolerar desde un punto de vista político que se esté insinuando siquiera que el Presidente o el Gobierno pueda terminar su período antes de tiempo, porque no corresponde”.
“Hemos conversado con diversos líderes de la oposición democrática para pedirles que fueran claros en rechazar esto y yo creo que la mayoría ya lo está haciendo”, refrendó.