A través de consultas y situaciones, la muestra, realizada por el mismo organismo que realiza la prueba TIMMS, analizó los conocimientos de los estudiantes en Educación Cívica en 36 países. En el último test, que incluyó a alumnos de octavo básico entre 2000 y 2009, los escolares chilenos quedaron en deuda. Obtuvieron 483 puntos, puntaje levemente inferior al promedio internacional de 500.
“El país ha ido mejorando y somos el primero en el contexto latinoamericano, pero aún falta para que nuestros niños tengan conocimientos y aptitudes de vida democrática y estamos lejos de países desarrollados”, dijo el secretario general de la Agencia de Calidad de Educación, Carlos Henríquez. “Esto no pasa sólo por un ramo, sino también por conocer, ejercer y ser partícipes de lo que debería ser nuestro país”, agregó.
En el análisis, los alumnos nacionales estuvieron entre de los que asignaron mayor importancia a la ciudadanía como movimiento social que el resto de los países. Sin embargo, ante la pregunta ¿qué es un gobierno de coalición? sólo el 56% de los estudiantes contestó correctamente, mientras que el promedio de las demás naciones fue de 71%.
En la prueba los jóvenes debían analizar situaciones concretas. Por ejemplo, se les preguntó por un caso en que el Congreso solicita a un ministro de Obras Públicas renunciar por haber adjudicado una construcción de un puente a la empresa de su hermano. La respuesta acertada era que la razón de la destitución se debía a los intereses privados que pudieron afectar la decisión. En Chile el 64% contestó correctamente, mientras que a nivel internacional la cifra llegó al 80%.
Otra de las interrogantes hizo alusión a un dibujo que muestra una elección masiva entre tres candidatos iguales y preguntó cuál es el mensaje o idea principal de la imagen. La respuesta era que las elecciones libres deben tener más de un candidato, pero sólo el 50% de los alumnos chilenos acertó. A lo menos preocupante.