En lo que se está convirtiendo en una peligrosa constante, el Ejército sufrió nuevamente un ataque en contra de sus instalaciones, esta vez el cuartel del Regimiento N° 23 de Copiapó, cuando en la noche del martes 14 un grupo de desconocidos atacó el recinto el con elementos incendiarios.

A través de un comunicado dado a conocer este miércoles, el Ejército reconoció el ataque, señalando que “un grupo de personas, sin mediar provocación alguna, comenzó a lanzar elementos incendiarios y piedras al interior del cuartel”.

En el texto se indica también que los individuos comenzaron “a golpear con objetos contundentes los muros del regimiento, hasta derribar parte del cierre perimetral”.

Luego de ello, en la unidad militar se activaron los “procedimientos de reacción establecidos para contener y disipar estos ataques vandálicos, logrando repelerlos mediante el empleo de armamento no letal”.

En esa misma línea, desde el Ejército aseveraron que -en el marco del ataque a este regimiento- el personal militar se encuentra facultado para repeler hechos de este tipo haciendo “uso racional de la fuerza y de las armas que el Estado de Chile le ha confiado, resguardando tanto el material de guerra proporcionado a la Institución como la propia integridad física”.

Finalmente, manifestaron que “tratándose de la comisión de delitos flagrantes, quienes se vean involucrados en tales actos podrán ser detenidos y puestos a disposición de las autoridades competentes, para la imposición de las penas que correspondan en cada caso”.

No es el primer incidente que vive este regimiento, que fue objeto de un ataque vandálico el 12 de noviembre,que dejó tres efectivos heridos. Además, el pasado 7 de enero, fue el turno del regimiento Colchagua, en San Fernando, el que sufrió la acción de antisociales.

Lea el comunicado oficial del Ejército: