El ritmo del mercado móvil sugiere que cada año un modelo queda olvidado. Sin embargo, la historia reciente demuestra lo contrario. Diversos analistas coinciden en que teléfonos con uno o dos ciclos de antigüedad siguen ocupando un espacio relevante y el iPhone 14 plus es uno de los ejemplos más citados. Su presencia en tiendas, nuevas o reacondicionadas, indica que la demanda continúa firme, especialmente entre quienes buscan equilibrio entre precio y rendimiento.
La misma tendencia se observa con el iPhone 14 pro, un equipo que conserva atractivo por su potencia y capacidades fotográficas. Informes globales señalan que muchos usuarios dan prioridad al balance costo beneficio antes que al lanzamiento más reciente. Esto ha permitido que dispositivos de la generación del 14 mantengan una base sólida de compradores en 2025, sin señales de quedar obsoletos de manera inmediata.
Qué mantiene vigente al iPhone 14 Plus y al iPhone 14 Pro
Una de las claves de su permanencia está en el equilibrio general que ofrecen. El 14 Plus destaca por su pantalla amplia, pensada para consumo de contenido y tareas intensivas. Su autonomía prolongada lo convierte en un modelo atractivo para quienes dependen del teléfono durante toda la jornada. La oferta de distribuidores chilenos muestra que los argumentos más repetidos giran en torno a la experiencia diaria, no solo al hardware.
El 14 Pro conserva un lugar especial entre quienes requieren un teléfono capaz de sostener procesos complejos, como grabación avanzada, edición ligera o uso intensivo de cámaras. Su desempeño sigue siendo suficiente para varios años más, según análisis globales que resaltan su capacidad para mantenerse vigente sin quedar relegado por la llegada de nuevas generaciones.
Ambos modelos continúan recibiendo actualizaciones de sistema. Esto garantiza continuidad en funciones y seguridad, elemento clave que influye en la decisión de compra. Para muchos usuarios, esta compatibilidad prolongada convierte al 14 en un dispositivo confiable. Medios especializados destacan que esta característica contribuye a su percepción como una compra que sigue valiendo la pena.
Finalmente, el paso del tiempo juega a su favor. Una vez que se estabiliza el mercado tras el lanzamiento de nuevos modelos, los precios bajan y la relación costo beneficio mejora. Esa etapa posterior al lanzamiento es especialmente valorada por quienes buscan rendimiento sólido sin asumir el gasto de un equipo recién presentado.
Así es el consumidor que sigue apostando por el iPhone 14
Aunque no existan estadísticas públicas recientes que detallen porcentajes exactos por modelo, es posible reconocer patrones en la forma de comprar del usuario chileno. Uno de ellos es la búsqueda de opciones que combinen vigencia con un costo manejable. En este punto, la presencia del 14 Plus y el 14 Pro en tiendas chilenas refuerza la idea de que sigue siendo una alternativa para quienes desean un teléfono moderno sin pagar el precio completo de la generación actual.
También aparece con fuerza el perfil de quienes necesitan un equipo confiable para trabajo, clases, redes y contenido digital, pero que no sienten urgencia por la novedad de cada año. Para estos usuarios, el 14 Pro funciona como un punto intermedio entre precio y capacidad. Su cámara, su procesamiento y su desempeño lo mantienen en un nivel más que suficiente para rutinas exigentes.
Existe además un grupo creciente de consumidores que optan por equipos reacondicionados o usados. Esta tendencia global se refleja en Chile, donde el mercado de segunda mano opera como una vía legítima para acceder a un teléfono con buen rendimiento y soporte. La presencia constante del 14 Plus y el 14 Pro en plataformas de compra y venta confirma que existe una circulación activa.
Cómo cambió en la demanda y fuerte entrada al 2026
Durante el último año se instaló un fenómeno que atraviesa tanto mercados globales como el chileno. Cada vez más usuarios están estirando el tiempo de renovación de sus teléfonos, apoyados en la capacidad de modelos recientes para mantenerse funcionales por varios ciclos. En ese escenario, el 14 Plus y el 14 Pro aparecen como alternativas que siguen rindiendo bien para tareas diarias, sin la sensación de quedar atrás.
Con 2025 llegando a su fin, todo indica que esta generación no solo se mantiene vigente, sino que entra a 2026 con un perfil claro. Su presencia en tiendas, su soporte de software y su posición en el mercado de segunda mano lo proyectan como una alternativa que seguirá compitiendo con comodidad frente a generaciones más recientes, especialmente entre quienes priorizan decisiones informadas antes que la renovación inmediata.
