Durante el seminario organizado por AthenaLab para conocer las propuestas de programas en seguridad, defensa y política exterior de las principales candidaturas presidenciales, el ex cónsul general de Chile en Bolivia y diplomática de larga carrera, Jorge Canelas, abordó algunos de los principales ejes de lo que serían las política en relaciones exteriores de un eventual gobierno del candidato presidencial de los partidos Republicano y Social Cristiano, José Antonio Kast.
Así, Canelas fue claro en el inicio de su exposición en recalcar que el manejo del actual Gobierno en relación a los vecinos no ha sido el mejor.
«Nos estamos encontrando con una cantidad de situaciones que el actual gobierno nos deja como un legado muy pesado, partiendo por lo vecinal. Para nosotros las relaciones vecinales siempre han sido prioritarias y hemos visto cómo en realidad nuestras relaciones con los vecinos en esta administración han sido bastante poco… diría, han dejado un regreso», detalló.
Vecindario: Argentina y Perú
A continuación pasó inmediatamente a referirse a la relación con nuestros vecinos trasandinos, comentando que «no ha habido contacto alguno con el actual presidente de Argentina. Y una de las primeras cosas que uno aprende en esta carrera es que cuando ve las situaciones de las relaciones vecinales que son prioritarias, es que no se puede personalizar. Las relaciones son entre estados y no entre personas».
Hizo hincapié luengo en que «le guste a uno o no estar de acuerdo ideológicamente o no con los mandatarios de los países vecinos, hay que tener un entendimiento permanente con ellos, especialmente con nuestra situación vecinal, que son muy complejas con los vecinos. Históricamente nuestra situación ha sido muy difícil. Y hay ejemplos de esto en la historia reciente».
Aquí pasó a ejemplificar con el vecino del norte, explicando que «hemos visto, en nuestras relaciones con el Perú, el presidente Alan García del Perú tuvo una política hacia Chile extraordinariamente pragmática, para entenderse con el gobierno militar. No podía estar más diverso su pensamiento ideológico, sin embargo, basado en la diplomacia peruana, que es muy profesional, pero el criterio personal del presidente Adán García siempre fue entenderse a lo mejor el gobierno de Chile. Y eso es lo que nosotros tenemos que hacer permanentemente con nuestra situación«.
En ese contexto, explicó que «ahí ya tenemos una cosa que necesitamos superar. Por eso hemos visto que nuestra política exterior es de un gobierno que se clasifica como un gobierno de excepción. Porque estamos recibiendo como un legado que a medida que pasa el tiempo cada vez se ve más difícil».
«Cada día que pasa estamos viendo, por ejemplo, la situación financiera de la cancillería tan dramática que se dejan de pagar el alquiler de inmuebles de las embajadas. A ese nivel estamos llegando. Es una política exterior basada en los valores tradicionales, en la tradición de la política exterior de Chile pragmática«, señaló luego.
Relación con EE.UU.
Por ello, Canelas enfatizó que «vamos a intentar recuperar eso. Hemos tenido una difícil relación con aliados tradicionales, con aliados estratégicos. También por ese voluntarismo que ha tendido más bien a personalizar las relaciones internacionales en vez de hacer un trabajo pragmático».
Aquí, enfatizó los vínculos con Estados Unidos, subrayando junto a lo anterior «especialmente cuando están involucrados los intereses serios, los intereses estratégicos. Nuestros aliados estratégicos tenemos que cuidarlos y eso es otra de las razones y prioridades que tenemos para ser en nuestra política exterior futura. Tenemos que recomponer nuestras relaciones, por ejemplo, con Estados Unidos».
«Actualmente, no vamos a decir que hemos tratado bien al presidente Trump, que nos puede gustar o no nos puede gustar, pero es el presidente de una de las primeras potencias mundiales y con quien vamos a tener necesariamente que entendernos bien», manifestó, para luego asegurar que «nosotros pretendemos mantener a los Estados Unidos como un aliado estratégico de Chile. ¿Quién gobierne ese país? Entonces, ahí nuestra visión difiere con matices, pero por la fuerza de las circunstancias».
«El presidente Boric ha tenido cuatro encuentros con el (líder chino) Xi Jinping, ninguno con el presidente Trump. Entonces, las próximas cuatro cumbres serán con Trump y después ahí vamos viendo».
Israel
En cuanto a la compleja situación en las relaciones bilaterales con Israel, Canelas aseguró que «ahí también yo creo que se han cometido algunas cosas que han ido un poco más allá de lo de lo razonable«.
«Es perfectamente lógico que el presidente Boric priorice el foco en los derechos humanos y haya puesto el acento en la situación de los derechos humanos en los excesos. Pero una cosa es el Gobierno de Israel y otra cosa es el Estado de Israel, con quien nosotros tenemos relaciones estratégicas estrechas y que afectan a nuestra seguridad internacional«, acotó luego.
Ante ello explicó que, «sin tener en conocimiento, yo no sé si habrá tenido alguna noción previa, lo dudo, pero teniendo eso en consideración, yo creo que antes de cortar toda relación con el Estado de Israel y que involucra materias que son sensibles para la seguridad chilena, habría tomado otra aproximación sin perder en ningún minuto los principios correctores de su política de derecho«.
Escenario mundial
Sobre el escenario internacional en el que debería convivir un eventual gobierno de José Antonio Kast, el diplomático sostuvo que «estamos viviendo un momento, un proceso de reacomodamiento geopolítico que hace tres o cuatro años no pensábamos que tenía que venir«.
Comentó luego que «hemos pasado de una situación en que nuestra visión para la gestión de la diplomacia iba a ser el soft power, y todo el mundo habla de soft power, y de golpe hemos llegado al retorno a la geopolítica más dura, pura y dura a través de los conflictos. Entonces, nos encontramos con un mundo, un complejo mundo en que tenemos que buscar cuál va a ser, cómo nos vamos a plantear frente al nuevo reordenamiento global y no va a ser un asunto fácil tampoco».
«Cuando hemos visto que las potencias ya están poniendo sus fichas, ¿no es cierto?, en los lugares donde ellos consideran sus zonas de influencia. Lo ha hecho China, lo ha hecho Rusia, y lo ha hecho Estados Unidos. Y nosotros hay que ver cómo hemos estado manejándonos históricamente y ha sido siempre un difícil equilibrio, mucho más cuando tenemos potencias que están demostrando su presencia y su poder con una fuerza inusitada. Entonces, movernos en un escenario complejo de por si que está en proceso de un reordenamiento en que se ha puesto de cabeza el sistema económico y comercial. Las normas de comercio internacional han sido totalmente ignoradas y hemos tenido que adaptarnos», explicó a continuación.
Por ello, recalcó que «estamos en un proceso de adaptarnos a una nueva situación del comercio internacional. Todas esas situaciones nos plantean desafíos enormes. Por ejemplo, si nosotros estaremos en un proceso en el cual nuestro foco va a ser la seguridad y el crecimiento económico, la política exterior tiene que ser funcional a esos dos principales objetivos que tenemos hacia el futuro».
Diplomacia económica
Canelas fue enfático en explicar que «les puedo plantear como ejemplo de que hemos desviado la atención sobre asuntos principales de nuestra política exterior para atender cuestiones que son absolutamente secundarias. Entonces, una política exterior focalizada enfatizando especialmente aquellas cosas en que la política exterior sea funcional a los principales objetivos y desafíos que tenemos por delante. Tenemos, por ejemplo, que planificar un reacondicionamiento de todo lo que es nuestra función de diplomacia económica».
«Hemos visto, por ejemplo, que el funcionamiento de la unidad que depende de la Subsecretaría de Relación Económica Internacional, también hay una cantidad enorme de mejoras que hacer. Hay que, por ejemplo, racionalizar la utilización y la focalización y cambiar los lugares de algunos destinos de agregados comerciales. Actualmente, perfectamente bien se puede trabajar, por ejemplo, con una persona encargada de los asuntos económicos de los Estados Unidos y no necesitamos cuatro o cinco agregados en un país», ejemplificó.
Continuó en este ejemplo diciendo que «podemos destinar esos agregados a otros destinos en los cuales nos interesa captar inversiones, porque también hay que hacer un asunto importante en la diplomacia de nuestro gobierno que las embajadas se concentren en buscar todo lo que sea posible en materia de nuevos destinos, por ejemplo, de exportaciones, diversificación de nuestros mercados. Atracción de inversión extranjera hay muchísimo que hacer en cuanto a lo que se refiere a la diplomacia económica. También es un asunto que hace prioridad».
«Y respecto de lo que nosotros pensamos buscar hacia el futuro, es, yo diría, dejar la casa en orden. Hasta ahora, lo que hemos sabido es que necesitamos hacer un trabajo serio dentro del Ministerio de Relaciones Exteriores que debiera funcionar mucho más eficientemente», concluyó Canelas.







