Como una «mala noticia para el país y el progresismo» calificó el ministro del Interior, Álvaro Elizalde, la decisión de la Federación Regionalista Verde Social y Acción Humanista de competir en una lista separada del resto de los partidos del oficialismo.
La decisión de los dos partidos oficialistas podría aglutinar asimismo a la Democracia Cristiana, que ha visto con interés la eventualidad de sumarse a esta lista alternativa para ampliar su base de candidaturas y evitar ir en una misma lista con el Partido Comunista, como también a otros movimientos menores como el Partido Popular, el Partido Animalista y la Alianza Verde Popular.
Acuerdo unitario aún posible
El secretario de Estado, en conversación con el programa «Ahora es Cuando» de Radio Infinita, mantuvo sin embargo su confianza en que se alcance un acuerdo, al comentar que «la negociación está en marcha todavía. Preferiría que sacáramos las conclusiones una vez que se inscriban las listas«.
Junto a lo anterior, Elizalde recalcó la importancia estratégica de una lista única para el oficialismo, argumentando que «para mejorar la elegibilidad y una mejor representación de las fuerzas progresistas en el próximo Congreso Nacional una lista única es un instrumento imprescindible«, advirtiendo que la división «va a permitir que los partidos tengan más candidatos pero menos electos».
El ministro apuntó a la falta de voluntad de «algunos actores», acusando que «había quienes ya desde hace mucho tiempo promovían las dos listas» y que se sentaron «a regañadientes» en las negociaciones.










