El paso que ha dado la Democracia Cristiana es histórico. Sin duda. Y no es un hecho episódico.***

Desde ese partido, y desde el Partido Comunista, de mediados de la década de los 90, del siglo pasado, se vienen dando diálogos y acciones tendientes a buscar y realizar acuerdos.

Más cerca que alejados

Ciertamente, en un contexto en donde la DC protagonizó la alianza llamada Concertación de Partidos por la Democracia; y el PC hizo coaliciones desde la Izquierda Unida; el MIDA; el PODEMOS y JUNTO PODEMOS MAS.Han sido acercamientos y diálogos no puramente electorales.

Incluso hay un texto, sobre la Democracia y la Justicia Social, que firmaron militantes históricos de la DC, como Eugenio Ortega, y suscribimos un grupo de militantes y dirigentes del PC, entre los cuales estaba Fernando Quilodrán.

Eso, tras un extenso período de reuniones; conversaciones y debates. En ambos partidos, este documento fue considerado un aporte sustantivo.

En diversos frentes sociales; territoriales y comunales, se han producido convergencias entre ambos partidos.

Y eso fue lo que derivó en los pactos por omisión en elecciones parlamentarias, entre los partidos de la Concertación, incluída la DC por cierto, y el PC.

Por otra parte, en estos días, diversas corrientes políticas de fuerzas de izquierda, que no son parte del agrupamiento de partidos que forman el actual gobierno, están dando pasos hacia el apoyo a la candidatura presidencial de Jeannette Jara, exponiendo una voluntad política que expresa y propone ideas programáticas de esas mismas expresiones.

También este es un hecho histórico

Es una confluencia significativa, que efectivamente se produce para impedir que la derecha sea gobierno y mayoría en el Parlamento, y también para generar cambios y transformaciones sociales y económicas que buscan superar la desigualdades, y las grietas y fisuras que existen en el Chile actual, y afectan profundamente a las mayorías nacionales.

La tarea está planteada.

Que estas nuevas asociaciones tengan la capacidad, y la voluntad, de generar una interacción con las millones de personas que por voto obligatorio votarán por primera vez en una elección presidencial, y en una elección parlamentaria.\

En otras columnas, hemos intentado descrirbir a estas personas y ciudadanía que será determinante en el resultado de las elecciones.

Son hijas e hijos del actual sistema de vida que tiene Chile, desde comienzos de los 90, hasta hoy.

Han vivido y viven las carencias sociales: sueldos; salud; viviendas; endeudamientos; entre otras.

Han vivido y viven, también, los asuntos que este sistema de vida les permite que acceder.

Su vivencia cotidiana respecto de flagelos como el crimen organizado y el narcotráfico puede estar en algo incidida por la espectacularización que hacen los medios. Sin embargo, viven realmente el temor que generan estos fenómenos, y han sido víctimas directas de ellos.

La unidad, en rigor, la única unidad eficaz, es que quienes forman esta unidad consideren que es a estas millones de personas las que hay que cambiar la vida que llevan hoy.

***Juan Andrés Lagos, es periodista, académico y encargado de comunicaciones del Partido Comunista de Chile