La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), denunció este domingo a través de su cuenta en X (Twitter) que «las autoridades israelíes están matando de hambre a los civiles en Gaza«.
«Entre ellos hay un millón de niños. Levanten el asedio: permitan que la UNRWA traiga alimentos y medicinas«, instó la entidad.
La agencia dice tener alimentos suficientes para alimentar a 2,1 millones de gazatíes durante más de tres meses.
Israel apenas permite la entrada de camiones desde el 2 de marzo y los pocos que lo logran casi siempre llevan harina y la mayoría son saqueados.
En mayo puso en funcionamiento un sistema basado en centros de distribución militarizados, donde ya han muerto más de 900 palestinos.
La falta de alimento es ya tan extrema que la ONG EEUU Rahma Worldwide alertó que más de un millón de palestinos están pueden morir de hambre.
Un doctor del Hospital de Naser dijo que familias están usando agua con sal a fin de intentar calmar los estómagos hambrientos de sus hijos.
Cada vez más personas llegan con signos de desmayo y exhaustos a emergencias.
Hambre y disparos
Existe «una afluencia sin precedentes» de personas con desnutrición extrema que llegan a los hospitales.
Estos concurren «en estado de agotamiento y con pérdida de movilidad debido al hambre prolongada«, advirtió Rahma.
En las últimas horas, tres bebés y un niño murieron por inanición, confirmó un funcionario del Ministerio de Salud local, administrado por Hamás.
Tropas israelíes mataron a 17 gazatíes al disparar contra un grupo de personas que esperaba la llegada de camiones con harina en el norte de Gaza.
Otros dos fueron asesinados en Rafah, cerca de uno de los puntos de distribución de la Fundación Humanitaria para Gaza.
Sucesos letales como este se repiten a diario debido a que esta organización reparte alimentos de forma muy limitada en complejos militarizados.
DZC (EFE, AFP)
